El abogado Jorge Chueco se negó a responder preguntas al juez pero dijo que no lavó dinero. Continúa preso
Jorge Chueco, el abogado vinculado al empresario kirchnerista Lázaro Báez e imputado en la causa de la llamada “ruta del dinero K”, negó hoy haber llevado adelante maniobras de lavado de dinero, pero se negó a contestar preguntas ante el juez federal Sebastián Casanello.
Chueco, quien está detenido desde días pasados, quedó preso en la cárcel de Ezeiza, donde ya están alojados Báez y el contador Daniel Pérez Gadín.
Luego de los estudios médicos que le hicieron ayer y confirmaron su buen estado de salud, Chueco fue trasladado antes del mediodía de hoy desde el edificio “Centinela” de la Gendarmería a los tribunales de Comodoro Py 2002, a bordo de un furgón de la fuerza de seguridad, con chaleco antibalas y casco y rodeado por una nube de efectivos fuertemente armados y con escudos.
Según su defensa, en la indagatoria Chueco “lamentó no haber podido quitarse la vida mientras estuvo desaparecido” (en rigor, huyó a Misiones y luego a Paraguay) y aseguró que “no había incurrido en los delitos que se lo acusa”, dijeron fuentes judiciales.
Sin embargo, por consejo de sus abogados Chueco aclaró que no iba a contestar preguntas y prometió ampliar su indagatoria más adelante, cuando sus defensores conozcan en detalle toda la causa.
Uno de los abogados, Ezequiel Altinier, dijo que por ahora “no va a pedir la excarcelación de Chueco”, quien fue derivado a un penal hasta que el juez resuelva su situación.
Y aunque se dijo que había presentado un escrito, su defensor aclaró que, eventualmente, lo hará más adelante, cuando acceda al expediente.
A Chueco se lo acusa de haber endosado 9 cheques que fueron depositados en Austral Construcciones SA por 208 millones de pesos, mientras que hizo viajes a Europa junto a Martín Báez, hijo de Lázaro Báez, ya procesado por lavado de dinero y convocado nuevamente junto a su padre para ampliar la indagatoria en los próximos días.
Chueco es considerado pieza clave en la causa por su trabajo en Austral Construcciones y en la compra de la financiera SGI a manos de Helvetic Service Group, de la que era apoderado.
Su indagatoria se activó luego de la declaración de Leonardo Fariña, el llamado “valijero” que estuvo dos años preso y a principios de abril se convirtió en “arrepentido”: contó detalles de las maniobras, de las financieras que intervinieron y de las peleas con la ex presidenta Cristina Fernández, luego de que el empresario santacruceño habría decidido quedarse con la plata de los negocios que le había facilitado Néstor Kirchner.
Chueco desapareció la semana pasada, luego de llamar a su esposa y avisarle que le había dejado una carta y dinero en la habitación de uno de los hoteles en los que se había registrado.
El abogado apareció acostado en uno de los corredores de Garganta del Diablo, aparentemente drogado y borracho, diciendo que quería suicidarse; lo llevaron a una comisaría y al final lo dejaron ir. No lo volvieron a ver hasta el martes pasado, cuando fue arrestado en la ciudad de Encarnación, Paraguay, cuando tuvo problemas en un hotel donde se había registrado horas antes y del que habría intentado tirarse del balcón, según dijeron los policías paraguayos que intervinieron en la detención.
Para esa altura, el juez Casanello ya había ordenado su captura nacional e internacional para indagarlo en el marco de los procesamientos dictados el lunes en la causa por lavado.
En esa resolución Casanello aseguró que “existen sospechas concretas de que entre el 14 de diciembre de 2012 y el 8 de abril de 2013, a través de una posible maniobra de auto-venta o autocompra de títulos de deuda pública por parte de Helvetic Services Group SA, se reingresó al país una suma aproximada de 33 millones de dólares que habrían sido insertados en el mercado local a partir de su depósito en una cuenta bancaria de Austral Construcciones SA en el Banco de la Nación Argentina, a través de nueve cheques por un total de $208.840.876, endosados por Jorge Chueco -como apoderado de Helvetic- y depositados por Eduardo Larrea y Claudio Bustos en nombre de Austral”.