Los escritores argentinos Jorge Consiglio, Cecilia Pavón, Nelson Specchia, analizan obras en contextos de enfermedades y encierros.
Como testigos de una época, los escritores han dado cuenta a través de sus obras de situaciones distópicas imaginadas a partir de enfrentamientos bélicos, invasiones externas o fenómenos naturales como plagas, pestes o epidemias que llevaron a situaciones de encierro y modificaron la cosmovisión universal, como sucede hoy con la pandemia provocada por coronavirus.
“Diario del año de la peste”, la novela de Daniel Defoe, es una de esas obras, señala Jorge Consiglio y explica que en el momento que la leyó le pareció “tremendamente verosímil”.
“Si mal no recuerdo, el narrador, en un momento, consigna la cantidad de entierros diarios en los cementerios de Londres durante la gran plaga de 1665. Esos datos tienen el mismo efecto que las cifras de infectados y de víctimas fatales que se dan hoy en los noticieros o se leen en los diarios. En el texto de Defoe, esos números generan un clima de tensión y de inminencia. Es un ‘minuto a minuto’ que se articula con el resto de la narración y le confiere una enorme inmediatez”, señala.
“Pienso también en otro libro muy hermoso “La quietud en movimiento” del alemán Bernd Stiegler, y si bien no se relaciona con pestes ni con enfermedades, sí con encierros. Stiegler escribe una historia de los viajes que se hacen sin salir de una casa. Su punto de partida es un libro de 1794, “Viaje alrededor de mi cuarto”, de un tal Xavier de Maistre. Este personaje aprovechó un arresto domiciliario de cuarenta y dos días para escribir su experiencia de viajar sin moverse de su lugar”, recuerda Consiglio.
“Stiegler en su recorrido por este tipo de literatura, consigna testimonios de estos viajeros inmóviles que, necesariamente, modifican lo cotidiano con su mirada extrañada. Una maravilla de libro”, añadió.
Igual mención hace la poeta y narradora Cecilia Pavón al recordar que “justo antes de que se desatara esta locura estuve en la universidad de Columbia leyendo un texto en el que cité el libro ‘Voyage autour de ma chambre’ de Xavier de Maistre, que es como una especie de parodia de la literatura de viajes del siglo XVIII y se trata de un soldado que está en cuarentena en su casa y hace una especie de viaje inmóvil”.
Por su parte, el narrador Nelson Specchia cuenta que a raíz de la pandemia por coronavirus ha vuelto a pensar en “On the Road”: la novela sobre un futuro post apocalíptico que Jack Kerouac escribió, según cuenta el mito que en torno a él se ha creado, en veinte días, del 2 al 22 de abril de 1951″ y que en ediciones en castellano apareció bajo el nombre “En el camino”, o “En la carretera”.
“Lo pensé no sólo por ese escenario helado tras una pandemia -que en la novela nunca termina de aclararse del todo de dónde vino, o cómo-, sino por las reacciones de los “otros”, hombres y mujeres, de esos coetáneos que, con cierto optimismo ingenuo, designamos como “humanidad”, dice.
“Ante el desastre y el peligro, en vez de la solidaridad y de la acción común a la que suponemos nos deberían conducir siglos de civilización y cultura, se vuelve de golpe al más primitivo “estado de naturaleza” hobbesiano, en el que no solo sobrevive el más fuerte, sino que el más débil debe verse reducido a comida, a alimento. Una advertencia feroz, pero una buena advertencia”, sostiene el escritor.