Cada vez que llueve en Mar del Plata, lo mismo ocurre debido al desagüe pluvial del lugar. Según una ordenanza aprobada en 2016, Obras Sanitarias debía colocar una malla o red de contención pero nunca lo hizo.
Cuando cae la lluvia en Mar del Plata, una imagen se repite: la plaza de Constitución se llena de residuos de todo tipo y este domingo, después de la intensa tormenta, no fue la excepción.
Marplatenses que caminaban por la zona vieron la postal y, al generarles un profundo enojo, decidieron capturarlo en un video con el objetivo de compartirlo y generar conciencia. En la arena había bolsas, botellas, papeles, paquetes y, hasta incluso, un monitor.
En las otras ocasiones en que esto ocurrió, quienes colaboran para volver a embellecer al lugar son los vecinos. Como pasó en febrero pasado cuando un grupo de 20 personas aseguraron que si ellos no hubieran limpiado, “todo hubiese ido al mar”.
Ordenanza
Según una ordenanza impulsada por la concejal de Unidad Ciudadana Marina Santoro y aprobada en diciembre de 2016, Obras Sanitarias debía colocar mallas o redes de contención para residuos sólidos “en todas las desembocaduras y/o tramos intermedios de desagües pluviales que vierten directamente en playas y mar”.
Eso debía realizarse “previa factibilidad”, de acuerdo al artículo 1 de la ordenanza 22.957. La norma establece además que “deberán retirarse periódicamente los residuos y desechos contenidos en las mallas y/o redes, intensificándose el mantenimiento luego de cada período de lluvia”.
Puntualiza que Obras Sanitarias “se encargará del mantenimiento en tiempo y forma de la recolección de residuos”. Para esas tareas tendrán prioridad contractual, aclara, “las cooperativas relacionadas con esa dependencia en tareas de limpieza y mantenimiento”.
Sin embargo, desde la empresa pública destacaron que, tal como señala la ordenanza, “la medida está sujeta a la factibilidad de su aplicación” y que lo que ocurrió fue que ya “se realizaron pruebas que no resultaron satisfactorias, por lo que se continúa buscando una solución integral”.
En cuanto al problema en sí, desde OSSE señalaron que se debe “comprender en primer lugar que los pluviales no generan basura por sí solos; los residuos que llegan a la costa junto con el agua de lluvia son los mismos que los vecinos arrojan desaprensivamente en distintos sectores de la ciudad”, algo que, según indicaron, motiva sus “continuas campañas de preservación de la higiene urbana”.
Una vez hecha esa aclaración, informaron que “los mecanismos de contención de sólidos que se han pensado para colocar a la salida de los pluviales no tuvieron el efecto esperado en virtud de la gran cantidad de desperdicios sueltos en la vía pública”.
Días atrás, una defensora del medio ambiente realizó un descargo tras visitar Mar del Plata y ver el estado de la ciudad, y sobre todo, de las playas. Tras realizar una limpieza en Playa Serena y Playa Grande en las que recogió una cantidad “increíble” de “colillas de cigarrillo” y “distintos tipos de plástico”, enumeró “hábitos diarios” para “cuidar la ciudad y el planeta”:
* Reducir la basura que se genere en las casas al separar lo orgánico y lo inorgánico.
* Reducir el consumo de gaseosas, aguas saborizadas, étc. que se venden en envases plásticos y optar por los envases retornables.
* Reducir el uso de plástico en las compras diarias con una bolsa reutilizable.
* Reducir el uso de utensillos descartables que terminan en la basura y contaminan por años.
* Reducir el uso de sorbetes en la bebidas.
* Hablar sobre la importancia de reducir, reutilizar y reciclar con el círculo íntimo.
* No tirar desechos en la vía pública.