La medida de fuerza fue levantada a las 10 y, progresivamente, quedarán en funcionamiento todas las líneas de trenes.
El Ministerio de Transporte y el gremio ferroviario de la Fraternidad arribaron a un acuerdo en torno al conflicto que motivó este martes un paro de actividades en los servicios e cargas y pasajeros de todo el país, por lo cual la medida de fuerza fue levantada a las 10 y, progresivamente, quedarán en funcionamiento todas las líneas de trenes.
Fuentes de la cartera de Transporte confirmaron a Télam el entendimiento y estimaron que, cerca del mediodía, quedarán normalizados los servicios, mientras continúa la reunión entre las autoridades y los representantes sindicales.
Los servicios de trenes de cargas y de pasajeros de todo el país se encontraban este martes paralizados a raíz de un una medida de fuerza de La Fraternidad en rechazo a una decisión judicial por la que se mantiene suspendido el funcionamiento del servicio entre Constitución y la ciudad bonaerense de Bahía Blanca debido a un descarrilamiento.
Esta mañana se registraron en las principales estaciones de trenes del Gran Buenos Aires en las paradas de los colectivos por parte de los usuarios habituales del servicio ferroviario que intentaba llegar por ese medio de transporte a sus destinos.
Ante la protesta, el Ministerio de Transporte convocó a una reunión en esa cartera que se inició a las 9 y que, cerca de las 10, derivó en un acuerdo.
Sobre la medida de fuerza, el ministro de Transporte, Alexis Guerrera, había indicado que “no es la acción que más nos convence y conforma” porque “siempre hay otros canales que pueden darle solución a los conflictos”.
Asimismo, había adelantado que desde el Ministerio se está “redoblando la asistencia al juzgado con más herramientas para que se resuelva rápidamente”, ya que el paro es por un “reclamo que La Fraternidad le hace a la Justicia” para que habilite la línea ferroviaria Constitución – Bahía Blanca.
En declaraciones a radio La Red, Guerrera consideró que “es un paro atípico” y luego planteó: “Tengo todas las expectativas puestas en que en pocos minutos podamos resolver el problema con los trenes”, previo a realizarse la reunión.
El secretario general de la entidad sindical, Omar Maturano, había ratificado ayer el paro “en defensa de la industria ferroviaria y los puestos de trabajo”, lo que esta mañana afectaba a todos los servicios de pasajeros y de cargas.
Por su parte, Trenes Argentinos había adelantado que se iba a poner en funcionamiento “un servicio alternativo de colectivos durante la jornada”
Por eso, esta mañana, muchas de las estaciones ferroviarias amanecieron con sus andenes bloqueados.
La acción de protesta había sido dispuesta el 21 de este mes por el Secretariado Nacional del gremio La Fraternidad, y fue ratificada anoche por Maturano para todas las formaciones de pasajeros y cargas.
“La Fraternidad no duda en defender a la industria ferroviaria y los puestos de trabajo, vulnerados por la decisión judicial de suspender los servicios entre Buenos Aires y Bahía Blanca por un descarrilamiento. La organización sindical también ratifica el estado de alerta y movilización”, enfatizó el dirigente, quien adelantó que continuarán los paros y el quite de colaboración en la actividad.
Maturano sostuvo en un video y en un documento de prensa que la industria ferroviaria “es de forma permanente atacada, en este caso por la justicia”, y añadió que el gremio también rechaza “las irregularidades producidas en la compra fantasma de pasajes en servicios de la actividad, que agotan las disponibilidades y transfieren pasajeros al sector del autotransporte”.
“El ferrocarril está siendo atacado y, prueba de ello, es lo que ocurrió durante el asfaltado de vías y ante la negativa de algunos intendentes a que los servicios se detengan en sus localidades, como ocurre en Chascomús, por ejemplo”, afirmó.
El malestar también se relaciona con “las conductas de algunos gobiernos provinciales que, violentando la ley, se adueñan de territorios ferroviarios propiedad de la Nación y utilizan terrenos para variados fines y no para construir viviendas para el personal, que no tiene casa propia en un 60 por ciento”, dijo.
“Algunas comunas de forma irregular asfaltaron vías en los pasos a nivel, lo que impide que los trenes paren en las estaciones de esas localidades. Existe una embestida contra la actividad. A ello se suma la compra fantasma de pasajes, lo que agota las comodidades para derivar pasajeros al autotransporte”, denunció.
Maturano embistió contra la decisión de algunos jueces, que prohibieron “la circulación ferroviaria entre Buenos Aires y Bahía Blanca, lo que beneficia a empresas automotoras que reaparecieron en el mercado a partir de medidas tendenciosas que golpean al tren, en un contexto nacional en el que fallecen más de 5 mil personas en accidentes de tránsito carretero”, enfatizó el sindicalista.
Para Maturano, “la clausura de servicios ferroviarios en ausencia de pericias técnicas previas afecta de forma económica a los sectores populares, que utilizan el ferrocarril por sus tarifas sociales”, y aseguró que a fin de preservar la seguridad “la justicia debe exigir a las empresas la reparación de infraestructura y material tractivo y rodante, ajustando a derecho la responsabilidad patronal”.
La justicia “optó por lo más fácil, es decir, una resolución contraria al sistema ferroviario”, dijo Maturano, quien sostuvo que “llama la atención que los organismos de control no funcionen a partir de la inexistencia de una Ley Federal de Transporte, que La Fraternidad pregona desde hace más de 15 años”.