La pequeña localidad del partido de Balcarce estuvo de fiesta. La banda de música del Ejército acompañó con un variado repertorio.
BALCARCE (Corresponsal).- La Escuela Primaria Nº 47 “Martín Miguel de Guemes”, de la pequeña localidad de Ramos Otero, fue epicentro de un emocionante festejo teniendo en cuenta que alcanzó sus primeros cien años de vida.
Sinónimo del arraigo para muchas familias que encontraron en una zona próspera del Partido, en cercanías con el límite de Ayacucho, una posibilidad laboral y de afianzamiento para que sus hijos fueran creciendo. Es allí donde la escuela cobró vial importancia y hasta ayudó para contrarrestar el fuerte éxodo que vivió el campo en general con la gente que decidió trasladarse a la ciudad en busca de mejores oportunidades.
Con la ayuda de las autoridades escolares que fueron pasando, del Consejo Escolar y el compromiso de las estancias de la zona el colegio fue ganando en infraestructura y hoy cuenta con un edificio que podría ser de envidia para muchos establecimientos de la ciudad.
Este domingo con motivo de su centésimo aniversario se hizo la fiesta, si bien la fecha de cumpleaños fue semanas atrás, las autoridades educativas y municipales confluyeron en esta jornada para llevar adelante la celebración.
La ceremonia fue encabezada por el secretario de Gobierno, Ricardo Stoppani, y la directora anfitriona, Lorena Oholeguy. Del mismo modo, intervino el inspector Jefe Distrital de Enseñanza, Mario Di Iorio; la presidenta del Consejo Escolar, Natalia Nolasco, la inspectora de Educación Primaria, Graciela Karaguiozov, miembros de la sociedad de fomento del lugar y vecinos.
Se contó con la presencia de la banda de música del Grupo de Artillería Antiaérea 601 del Ejército, con asiento en Mar del Plata, cuya presencia engalanó la actividad.
También se hizo oportuna la ocasión para presentar un mural alusivo que elaboró especialmente hace muy poco tiempo el artista Emilio Ferrero.
Se descubrieron tres placas: una por parte del municipio, otro de la Asociación Cooperadora y una tercera de una familia muy identificada con el establecimiento. Se escucharon los discursos de rigor, donde la directora señaló que “es una fiesta familiar, donde los protagonistas son los alumnos porque ellos son lo más importante que tienen las escuelas. Acá también se vio la participación de la directora, exdocentes, exalumnos y padres, y eso es muy importante para una institución de estas características”.
Asimismo, indicó que “pasaron muchos años y, seguramente, muchas historias, para que esto ocurriera hubo y hay mucho amor por parte de la comunidad hacia la educación, que hace un gran esfuerzo día tras día. Ese amor permitió que esta escuela siga vigente y que hoy todos podamos compartir estos cien años de vida”.