Los cortes de pelo y baños para mascotas bajaron un 50%, mientras que las consultas lo hicieron un 30%. Si bien los alimentos no se dejan de comprar, se eligen de menos calidad.
Las consultas en las veterinarias disminuyeron desde diciembre, pero la merma se nota aún más en los servicios relacionados con la estética de las mascotas y los accesorios que suelen usar.
La explicación para las reducciones es la misma que afecta a otros rubros. “No hay plata”, dijeron los veterinarios, parafraseando al presidente de la Nación Javier Milei.
“Las consultas bajaron, pero si el animal está enfermo, lo tenés que tratar. Donde más se nota es en la peluquería y los baños”, sintetizó Mariano Calvo, propietario desde hace más de tres décadas de la veterinaria “Alberti”.
“Desde marzo a esta parte las consultas bajaron un 30 por ciento mientras que los cortes de pelo y baño, un 50 por ciento. Pasa como con todo, se priorizan los gastos”, analizó el veterinario Juan Úbeda, al frente de la veterinaria “La Amistad”.
Asimismo, desde el Colegio de Veterinarios local coincidieron en que el último tiempo hubo un gran incremento de los insumos y zooremedios. “En la mayoría de los casos, son importados, entonces están atados al dólar”, aseguró el presidente de la entidad, Walter Luján.
El veterinario detalló: “Cuando subía el dólar, subieron los precios. Ahora que está estable no bajaron, pero las listas de precios se estabilizaron”.
A pesar de la reducción de las consultas, aclaró: “Los tenedores de animales domésticos, como todos, se fijan en los gastos, pero no dejan de hacerlos atender. Son un integrante más de la familia, entonces se cuidan en otros gastos superfluos, pero no dejan de atenderlos”.
Además, confirmó que el mayor descenso se da “en cuestiones superficiales, como el corte de pelo, de uñas y baño”.
Si bien el precio de cada consulta depende del animal a tratar, desde el Colegio de Veterinarios sugirieron que el precio parte de los 10 mil pesos.
Historia
En la veterinaria “San Roque” también notaron un “descenso” en las consultas, pero “básicamente en cuestiones superfluas, no de salud”, como el baño y el corte de pelo.
“Comer no pueden dejar de comer -señaló el veterinario Jorge Sacceri-, pero el que compraba el alimento más caro ahora compra uno de mediana calidad y el que compraba de mediana calidad compra uno más económico”.
Los costos que más aumentaron fueron “los relacionados con los medicamentos y las vacunas, además de los desparasitadores”, detalló Luján.
Para canes, por ejemplo, hay un calendario anual de vacunas “como la quinta o la sexta, cuyas aplicaciones parten de los 15 mil pesos”. En materia de desparasitadores, que deben aplicarse cada cuatro meses, las tarifas “varían de acuerdo a las marcas y el formato de aplicación”, partiendo desde el piso de los 10 mil pesos.
“Los aumentos de los insumos no son nuevos, vienen subiendo desde 2022, pero en la semana que asumió Milei todo subió entre un 25 y 100 por 100. Un despropósito”, aclaró Calvo. Asimismo, destacó: “Si sube el alimento o los medicamentos, eso se traslada directamente a los precios. La que está atrasada es la mano de obra de los veterinarios”. Y agregó: “Nosotros los mayores problemas los vemos con los jubilados y también con los asalariados. Incluso nos afectan en la guardería: en promedio, siempre teníamos entre 20 y 30 perros, que son de marplatenses que se van de viaje. Hoy tenemos solo tres”.
En tanto, desde el Colegio de Veterinarios se mostraron optimistas al pensar que esperan que “esto se estabilice”. “Los aumentos se notaron mucho en los medicamentos e insumos, pero esos precios no bajaron como el dólar. Habrá que esperar”, reiteró el presidente de la entidad.
Establecido en el local de Talchuano al 1500 desde principios de los 90, el doctor Saccheri reconoció: “Pasamos por varias crisis, estamos acostumbrados, somos argentinos”. Y se esperanzó con “una mejoría en el panorama en el corto plazo”.