El oficialismo obtuvo una contundente y aplastante victoria en Mar del Plata en lo que se leyó como un respaldo a la gestión del intendente Montenegro. Satisfacción además en el radicalismo por el triunfo de Ariel Martínez Bordaisco en la quinta sección.
Por Marcelo Pasetti
Esta vez, en Mar del Plata se registró el mismo resultado electoral que a nivel provincial y nacional, lo cual no venía sucediendo en los últimos comicios donde este distrito se convertía en una isla.
Y en la ciudad hay grandes ganadores, cuyos nombres no aparecieron en ninguna de las numerosas boletas que poblaron los cuartos oscuros, tal el caso del intendente Guillermo Montenegro, quien atravesó una importante prueba de fuego en la mitad de su mandato, recibiendo el masivo respaldo de la ciudadanía. La contundente victoria de la lista de unidad local a la que llegaron el PRO y la UCR, encabezada por Fernando Muro, fue más que celebrada por el jefe comunal. De hecho no esperaban ganar con tanta amplitud, admitieron anoche sus principales figuras.
Otro ganador fue Maxi Abad, uno de los arquitectos de la candidatura de Facundo Manes, quien anoche estaba eufórico. Su delfín político, Ariel Martínez Bordaisco, se imponía en la categoría de senadores provinciales de la quinta sección electoral, derrotando a Alejandro Rabinovich, mano derecha del intendente municipal. La lista de Facundo Manes tuvo una muy buena actuación también en Mar del Plata, aunque no le alcanzó para superar a Diego Santilli.
Queda en claro también que el radicalismo encontró anoche a su candidato presidencial para el 2023. Un dolor de cabeza para el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, quien deberá lidiar con el neurocientífico Facundo Manes en esa carrera que ya arrancó.
El intendente Guillermo Montenegro se puso la campaña al hombro y ahora le tocará encarar una nueva campaña, seguramente sin la pandemia de coronavirus como el tema prioritario, lo cual constituirá otro desafío.
En contraposición, en el Frente de Todos no había nada para celebrar. Al margen de la derrota de la lista de la precandidata a diputada nacional Victoria Tolosa Paz -la televisión, cuando no se conocían los datos oficiales, mostraba festejos de los máximos dirigentes del Frente- el resultado registrado por la lista de concejales encabezada por Virginia Sívori quedó muy lejos de satisfacer las expectativas.
Una vez más, la ciudad le es esquiva al peronismo. Desde 1983 hasta la fecha se concretaron diez elecciones para intendente, y otras diez legislativas. En esos 20 comicios, el peronismo nunca pudo ganar.
Y peor aún, la fuerza liderada por la titular de la Anses, Fernanda Raverta, quien le puso el cuerpo a la campaña, volvió a fracasar en su intento de mejorar su rendimiento electoral entre las capas medias de la sociedad. Ese fue el gran objetivo de “pegar” a Ariel Ciano -el dos de la lista- junto a Sívori para seducir al electorado de los circuitos electorales céntricos. Y fue en definitiva allí donde la diferencia a favor del oficialista Fernando Muro fue más amplia.
Asimismo, si se comparan resultados con la última elección -en la que el justicialismo estuvo más cerca que nunca del primer lugar, oportunidad en la que Fernanda Raverta perdió la intendencia a manos de Guillermo Montenegro por 9.712 votos, o 2,32 puntos-, el rendimiento de ayer se puede leer como un retroceso. Muro aventajó a Sívori por casi 20 puntos. En cambio, si se toma como parámetro la elección más parecida a la de ayer -las PASO del 11 de agosto de 2019- el peronismo tuvo ahora una actuación similar. En aquella oportunidad, Juntos logró el 36,44% de los votos mientras que el Frente de Todos alcanzó el 28,95% apenas dos puntos más que ayer cuando llegó al 27%
Nunca se dio vuelta el resultado
Debe consignarse que desde las PASO concretadas en 2011-seis con la de ayer- en Mar del Plata el ganador de esa instancia volvió a imponerse luego en los comicios posteriores. Y en la mayoría de los casos, el vencedor sumó más votos en esa segunda oportunidad. Así pasó el 22 de octubre de 2017 (Vilma pasó del 41,95% al 48,62%), y en todas las ediciones anteriores, salvo en 2015 cuando Cambiemos logró el 52,29% de los votos en las PASO (Arroyo 32,44% y Baragiola 19,85%) pero en las generales obtuvo el 47%.
Las PASO de ayer, en tanto, dejaron fuera de carrera a una veintena de listas, muchas de las cuales obtuvieron apenas un puñado de votos.
Serán entonces seis las listas que se disputarán las preferencias de los electores de Mar del Plata y Batán en noviembre próximo. La gran sorpresa se dio con el tercer puesto para Avanza Libertad, convertida en la tercera fuerza local.
Además de las nóminas encabezadas por Fernando Muro (Juntos) y Virginia Sívori (Frente de Todos), pasaron la prueba de ayer, superando el 1,5% de los votos, la lista de Avanza Libertad (se impuso Gustavo Adrián José en la interna), el Frente de Izquierda (victoria de Alejandro Martínez), Fernando Telpuk (AM Vamos con Vos) y la de Fernando Navarra, de Crear. También debe consignarse que hubo más votos en blanco que los cosechados por algunas de las fuerzas que seguirán en la carrera electoral.
De cara a los próximos comicios de noviembre, en las distintas fuerzas políticas llegará el tiempo de análisis y de definición de estrategias. Para el oficialismo, el desafío pasará por ratificar la excelente elección de ayer. Montenegro llegó a estos comicios en condiciones casi ideales, con el registro más bajo de contagios de coronavirus del último año, y logrando mantener la unidad en el plano local con el radicalismo, a través de las negociaciones y acuerdos logrados con el presidente del Comité Provincia de la UCR, Maxi Abad. “En noviembre el clima electoral será totalmente diferente”, aducen desde el kirchnerismo. Para el jefe comunal, tras los comicios de noviembre se iniciará una nueva etapa. Si su objetivo -como todo parece indicarlo- será buscar la reelección en 2023, deberá encarar la gestión postpandemia, con las secuelas económicas y laborales que deja la misma. Seguramente, la máxima figura distrital del PRO oxigenará su gabinete teniendo en cuenta la nueva agenda que se impondrá.
En el Frente de Todos, en tanto, también habrá debate interno y llegarán los pases de factura de aquellos sectores del justicialismo a los que no se les habilitó la participación en las PASO (caso Rodolfo “Manino” Iriart). “Algo se debe estar haciendo mal. Nos vamos a dormir con un sabor amargo”, admitía con franqueza un concejal del principal frente opositor. Se apuesta, con vistas a noviembre, al “voto útil”, es decir, a absorber votos de fuerzas ayer eliminadas e incluso de otras que llegarían prácticamente sin chances. O, en el mejor de los casos, que esas fuerzas -especialmente Avanza Libertad y Crear- se puedan quedar con 3 o 4 puntos que estarían ideológicamente más cerca de Juntos que del FdT.
Párrafo aparte para lo sucedido con la lista apadrinada por el ex intendente Gustavo Pulti. Pagó los costos, la lista local de AM encabezada por Fernando Telpuk, de transitar en un paisaje de total polarización entre las dos fuerzas que la antecedieron. “Hicimos una mala elección”, admitió anoche Pulti ante la confirmación de que la nómina de su partido vecinal apenas rozaba el 4 por ciento de los votos.
No le será fácil a Acción Marplatense llegar en noviembre al 8,33% de los sufragios, lo cual le abriría la puerta al ingreso de uno o dos concejales. De no duplicar el caudal de votos alcanzado en la víspera, dejará que las doce bancas en juego del Concejo sean repartidas entre Juntos y el Frente de Todos. Es más, si ayer se hubiesen realizado las elecciones legislativas, el oficialismo se apuntaba ocho de las doce bancas en juego.
Una oportunidad para no desaprovechar
Asimismo, lo más “jugoso” electoralmente de la jornada de ayer, fue la interna de Juntos en lo referente a los candidatos a senadores provinciales. Ariel Martínez Bordaisco, el delfín del titular de la UCR provincial, Maxi Abad, fue el gran vencedor en la quinta, superando a Alejandro Rabinovich, la mano derecha del intendente Montenegro.
La lista de Manes tuvo una excelente actuación no sólo en Mar del Plata -perdió por escaso margen ante Santilli- sino en toda la región donde logró un triunfo contundente.
De todos modos, Martínez Bordaisco y Rabinovich -de replicarse los resultados de ayer- serán senadores provinciales a fin de año. A ambos, en el viaje a La Plata, se les sumará Pablo Obeid (el candidato más votado en forma individual) compañero de Raverta, quien encabezó la boleta seccional del Frente de Todos.
Se espera que el accionar de los senadores que representarán a Mar del Plata, adquiera un compromiso más firme con la ciudad a la que representan, en contraposición con lo que se registró en estos últimos cuatro años. El desafío de “pelear” por una mejora en la coparticipación de los fondos provinciales que recibe General Pueyrredon -en el ranking ocupa el espacio 134 de 135 municipios- debería convertirse en una cuestión que unifique a oficialismo y oposición en el Senado.
– Muro ganó por 20 puntos y se encamina al triunfo en noviembre
– Montenegro, tras el contundente triunfo de Juntos: “No esperaba una diferencia de 20 puntos”