La pericia realizada al cuerpo hallado en una playa de la zona de El Alfar confirmó que murió por paro cardiorespiratorio por sumersión.
La autopsia realizada a Lázaro Juárez (20), el joven hallado sin vida en una playa de la zona de El Alfar, confirmó que no tenía signos de violencia y que murió por paro cardiorespiratorio por sumersión.
De esta manera, para los investigadores gana fuerza la hipótesis que la muerte de Juárez habría sido un suicidio.
Juárez había desaparecido el pasado fin de semana sin embargo unos días después fue visto en el Parque Municipal de los Deportes. El abandono de trabajo que hizo y algunas nuevas relaciones llevaron a pensar a las autoridades policiales y judiciales que se trataba de una conducta voluntaria y no forzada.
Según pudo saber LA CAPITAL tras consultar distintas fuentes, el cadáver llevaba colocado sólo ropa interior, una zapatilla y presentaba diversos tatuajes. Las primeras pericias indican que el cadáver no tenía signos de violencia y se encontraba en estado de putrefacción.
El hecho, que en un principio estaba caratulado como “averiguación causales de muerte” es investigado por la fiscal Andrea Gómez.