El doctor en Ciencias Químicas y licenciado en Biología recibió el premio Honoris Causa en la Universidad Nacional de Mar del Plata.
Por su experiencia y su manera de lucirse y desequilibrar en su campo de trabajo, al doctor Alberto Rodolfo Kornblihtt lo apodan el “Messi de la ciencia“. Lejos de todo marketing, el doctor en Ciencias Químicas y licenciado en Biología cuenta con una descollante carrera ligada a la docencia y la investigación. El viernes fue premiado por la Universidad Nacional de Mar del Plata con el título Honoris Causa y luego brindó una charla en el complejo universitario.
La homosexualidad “no está determinada por un gen”. El cáncer “nunca se va a erradicar”. Quienes se oponen a la legalización del aborto “lo hacen por prejuicios ideológicos y no por evidencia biológica”. Kornblihtt es un hombre de definiciones contundentes y a los 65 años mantiene más viva que nunca su inquietud y curiosidad permanente por descubrirlo todo y divulgar conocimiento.
En el marco de la importante distinción que le entregó la UNMdP, el investigador superior del Conicet y profesor de la Universidad de Buenos Aires dialogó con LA CAPITAL y destacó la “gran incidencia” de la biología en “las decisiones que hay que tomar como sociedad”, aunque dejó en evidencia que la política y el establishment “no escuchan” lo suficiente a la ciencia y la tecnología.
Militante de la universidad pública
“Recibir el título de Honoris Causa es un gran orgullo, sobre todo porque proviene de una universidad tan importante como la de Mar del Plata”, afirmó Kornblihtt y enseguida acotó: “Soy un ferviente militante de la defensa de la universidad pública argentina, que es el semillero de los mejores graduados en todas las disciplinas y lo que va a permitir un futuro para el país”.
Para Kornblihtt, la educación universitaria “no es un privilegio” sino “un derecho del que deberían poder gozar todas las personas”.
Biología de amplio alcance
Dentro del campo científico, la biología ocupa un lugar preponderante. Pero hacia afuera, su injerencia amerita aclaraciones para comprender su real importancia.
“La biología es una disciplina muy amplia que influye en lo cotidiano, en las prácticas agropecuarias, la producción de medicamentos, el diagnóstico y los problemas ambientales”, remarcó el además investigador y director del Instituto de Fisiología, Biología Molecular y Neurociencias.
“Es una de las disciplinas que más influencia debería tener sobre las decisiones que hay que tomar como sociedad”, dijo y destacó que “puede romper ciertos mitos que no están basados en la evidencia”.
Sin embargo, el campo científico general, “no siempre es debidamente escuchado” por el poder político, algo que a su entender constituye un error.
“No tenemos la bola de cristal, pero sería bueno que el establishment y la política se apoyen más en la ciencia y la tecnología”, subrayó Kornblihtt y le apuntó al Gobierno de Mauricio Macri, que “por su estrato social y económico tiende a reducir el rol del Estado y a considerar poco importante generar ciencia y tecnología nacional porque se la puede comprar de afuera, pero también porque tiene un cierto desprecio contra lo que implica investigar: genera pensamiento crítico y eso no es bueno para quien quiere poder basado en ciertas verdades”.
Aborto: un debate necesario
Dentro de esas “decisiones” que un país debe tomar como sociedad, sobresalió el año pasado su aporte científico en el debate del proyecto para la Interrupción Voluntaria del Embarazo. Su discurso se centró en la “confusión” entre los conceptos de embrión y persona jurídica.
“Es un debate absolutamente necesario en nuestro país”, le dijo a LA CAPITAL y destacó: “Tengo esperanza de que el Congreso vote en algún momento la Interrupción Voluntaria del Embarazo. Mi aporte apuntó a sumar datos sobre la naturaleza del embrión y la diferencia que existe con un bebé nacido. Esa diferencia la ley ya la reconoce, por eso no hay cementerios para fetos ni para embriones”.
Seguido, agregó: “Si una mujer aborta por voluntad propia o no, el castigo para el médico por el supuesto delito es muy inferior al de un asesinato, porque el estatus de ese embrión no es el mismo que el de una persona. Hay connotaciones que ya nos dicen que no es lo mismo. Quienes están en contra lo están por prejuicios ideológicos y no por la evidencia biológica”.
Honoris Causa
El Doctorado Honoris Causa es la mayor distinción honorífica que la Universidad Nacional de Mar del Plata puede otorgar a una personalidad eminente externa a la misma. La UNMdP ha brindado este titulo a referentes de la cultura y la ciencia, entre otros a Dora Barrancos, Gabriel Rabinovich, Horacio Luis González y Nora Cortiñas.
En este caso, se le otorgó al doctor Alberto Kornblihtt por su “compromiso con la educación pública y la función social de la ciencia” y, a su vez, por “la claridad y firmeza de sus posturas en defensa de la ciencia como proveedora de beneficios en la aplicabilidad de conocimientos y en el refuerzo de valores culturales y sociales”.
— “El cáncer nunca se va a poder erradicar”
El campo de la biología está hace años ocupado en la gran cantidad de casos de cáncer que se detectan en el mundo. Y en ese sentido, el doctor Alberto Rodolfo Kornblihtt compartió un dato contundente: “Nunca se va a erradicar”.
“Algunos tipos de cáncer se pueden combatir con inmunoterapia, con anticuerpos muy específicos. Si no tuviéramos científicos que puedan interpretar y explicar cómo se utiliza esa medicación, no se podría combatir el cáncer como se lo está combatiendo”, dijo.
Pero además, destacó los avances en “la detección temprana que llevan a la cura” y en el aumento de la esperanza de vida por los tratamientos modernos, y advirtió: “El cáncer nunca se va a erradicar, porque forma parte de los seres vivos: cuando una célula muta, solo sobreviven las que dejan más descendientes. Podemos convertirlo en enfermedad crónica o manejable, disminuir los casos fatales, pero no es como la viruela, que una vez que se elimina el virus ya nadie la tiene. El cáncer se va a controlar y a mejorar la terapia, pero la erradicación es imposible porque es inherente a nuestras células”.