Fuertes cuestionamientos a la gestión anterior del ministro de Justicia y Derechos Humanos bonaerense.
El ministro de Justicia y Derechos Humanos bonaerense, Julio Alak, dijo este miércoles que la decisión del gobernador Axel Kicillof de realizar una inversión para sumar 1.350 nuevas plazas penitenciarias se debe a que el sistema carcelario provincial tiene un déficit de 17.000, que dejó la gestión de la ex mandataria María Eugenia Vidal.
“El gobernador decidió hacer una inversión de 800 millones de pesos en infraestructura carcelaria para sumar 1.350 plazas, que mejorarán las condiciones de los internos en la provincia”, destacó Alak, tras asegurar que la gestión de Vidal “dejó un sistema absolutamente colapsado, con 51.185 internos”.
En declaraciones a El Destape Radio, el ministro aclaró que durante la gestión anterior se sumaron a las cárceles bonaerenses unos “16.000 internos, y lo peor es que, ante esa realidad, solo agregaron 1.035 plazas”.
De esta forma, detalló el funcionario del gabinete de Axel Kicillof, cuando asumió la nueva gestión encontró “una verdadera catástrofe, una verdadera crisis humanitaria” en las unidades penitenciarias.
Alak insistió en que durante la gestión de Vidal “la tasa de detenciones se disparó a las nubes”.
En ese marco, detalló que Argentina, sin contar con la provincia de Buenos Aires, tiene una tasa de 71 presos cada 100.000 personas, “lo que no es un promedio malo teniendo como referencia a Suecia, que tiene una tasa de 50, pero la gestión de la ex gobernadora llevó ese promedio en la provincia a 300”.
Asimismo confirmó que se van a construir “12 centros sanitarios modulares que podrán aislar a 800 internos que puedan estar contagiados de coronavirus, y de esa manera evitar que vayan a los hospitales”.
La decisión de ampliar la capacidad de alojamiento en las cárceles y de construir módulos sanitarios fue anunciada ayer por el propio gobernador Axel Kicillof en el marco de la polémica suscitada por un fallo del Tribunal de Casación que propiciaba la concesión del beneficio de prisión domiciliaria a presos a raíz de la pandemia, cuya aplicación fue suspendida ayer por la Suprema Corte de Justicia provincial.
En la entrevista que concedió esta mañana, Alak aseveró que “el coronavirus afecta preferentemente a los lugares de encierro porque no se guardan las distancias”.
“En las cárceles superpobladas que heredamos es imposible el distanciamiento, y ahí el contagio puede ser masivo”, agregó.
Consultado sobre la actuación del procurador general bonaerense, Julio Conte Grand, el ministro dijo que “fue nombrado en el anterior gobierno y es quien debe accionar los pedidos de libertades o domiciliarias”, pero negó que la administración de Kicillof tenga intención de impulsar su remoción.
“Sí nos parece que no es conveniente que el procurador sea el que maneje fiscales y defensores, que a nivel nacional están separados; eso debería modificarse”, opinó Alak.
Finalmente, el ministro subrayó que “es un disparate decir que presionamos jueces” desde el gobierno provincial, ante algunas acusaciones que circularon en los medios.
“Desde que asumió, Kicillof no designó a nadie. Ni siquiera a un miembro de la Suprema Corte para que ocupe una vacante” en el máximo tribunal provincial, remarcó Julio Alak, quien indicó, además, que “no hay un solo juez que haya dicho que recibió un llamado nuestro para liberar a alguna persona”.