El presidente del Banco Provincia destacó los programas para sostener a las pymes en la pandemia y planteó el desafío de consolidar la recuperación. "El banco está en una situación de mucha solidez patrimonial, financiera que nos permite apalancar las políticas que pensamos", dijo.
Por Hernán Kloosterman | Twitter: @h_kloosterman
Juan Cuattromo explica con claridad la situación y los desafíos del Banco Provincia y no deja de resaltar el apoyo que la institución brinda a las pymes y la importancia de los programas para sostener la actividad en la pandemia. Es acaso, para el presidente del banco una de las mayores satisfacciones en el tiempo que lleva de gestión.
Para dimensionar, aporta números. “En General Pueyrredon, hemos asistido a más de 1.000 pymes en 15 mil millones de pesos en estos dos años y claramente, ese es un desafío estratégico del banco: seguir acompañando al sector pyme“, suelta en un mano a mano con LA CAPITAL.
Sentado en una de las oficinas del Museo MAR, Cuattromo destacó la “robustez financiera” del Banco Provincia, consideró que la recuperación de la actividad está “por encima de lo esperado” y adelantó que espera que este año se puedan anunciar programas de créditos para viviendas.
– ¿Con qué desafíos encuentra al banco el año del bicentenario?
– Para nosotros, los desafíos y la gestión del banco siguen los mismos lineamientos que fijó Axel en 2019. Durante toda la campaña había sido muy explícito sobre el rol central que esperaba del Banco Provincia. Por supuesto por la pandemia, hubo que ajustar prioridades, redefinir tiempos de algunas cuestiones, pero fueron cuatro años de crisis, más dos de pandemia y son seis años de mucha crisis que tenemos que empezar a revertir en los próximos seis. Y el banco va a estar inserto en esa estrategia, siguiendo con los lineamientos que guían nuestra acción que es financiamiento a la producción, innovación y cercanía. Entendemos, además, que es una manera de consustanciarnos con las mejores tradiciones del banco en estos 200 años.
– El banco cumple un rol importante en el financiamiento a las pymes. ¿Se evalúa alguna otra medida en ese sentido?
– Lo importante es que las líneas que lanzamos en febrero de 2020, antes de la pandemia, las sostuvimos, las profundizamos y ya pasan a ser una marca propia del banco. Toda la línea de reactivación pyme que financia desde descuento al cheque hasta líneas de inversión para ese sector de pequeñas y medianas industrias. En General Pueyrredon, hemos asistido a más de 1.000 pymes en 15 mil millones de pesos en estos dos años y claramente, ese es un desafío estratégico del banco: seguir acompañando al sector pyme. Es uno de los ejes centrales y en donde el banco viene creciendo en términos de participación del mercado.
– ¿Ese impulso a la producción es además uno de los ejes para revertir la situación económica del país?
– Sí, es uno de los desafíos y para nosotros es estructural. Lo que el banco financia con todas las políticas que articula con el gobierno provincial y nacional, por eso firmamos muchos convenios con el Ministerio de Desarrollo Productivo o de Desarrollo Agrario. Son formas de acompañar a los sectores más golpeados para que puedan activar su producción, generar ingresos y a partir de ahí, pagar los créditos. Creemos que ese es el rol virtuoso a diferencia de los créditos con tasas ridículas que supo haber.
– ¿Se evalúa algún programa especial de créditos para viviendas?
– Venimos trabajando y esperamos este año tener anuncios junto al Ministerio de Hábitat de Nación y de Vivienda en provincia. Para poder generar ese tipo de solución necesitamos una respuesta integral entre diferentes niveles de gobierno para que sea un crédito accesible en las condiciones actuales. Venimos trabajando fuerte y esperamos este año poder tener líneas para este sector.
“Lo importante es que las líneas que lanzamos en febrero de 2020, antes de la pandemia, las sostuvimos, las profudizamos y ya pasan a ser una marca propia del banco”.
– ¿El objetivo para este año?
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Cuando nosotros recibimos el banco, estaba en una situación de mucho desorden de funcionamiento, no tenía una estrategia clara y había situaciones estructurales, no necesariamente generadas en la gestión anterior, pero que no se terminaban de resolver, como cuestiones normativas o regulatorias. En estos dos años parte de esas cuestiones ya se resolvieron y el banco está en una situación de mucha solidez patrimonial, financiera y eso nos permite apalancar todas estas políticas que estamos pensando. Nuestro desafío es encarar el bicentenario del banco emparentando nuestra gestión con esto que entendemos que son las mejores tradiciones del banco. Es un banco de todos los bonaerenses y tenemos que aprovechar la presencia territorial para generar servicios financieros, de bajo costo, de calidad y estando muy cerca de los que producen.
– ¿Cómo ve el escenario económico del país y el eventual acuerdo con FMI?
– Estamos viendo una recuperación en la actividad muy fuerte, muy por encima de lo esperado y eso es algo que nosotros tenemos que sostener. Durante la pandemia el desafío era generar herramientas que permitan sostener las actividades productivas funcionando y los puestos de trabajo porque esa es la plataforma para una posterior recuperación. Eso terminó pasando. Nuestra expectativa es que esa recuperación se consolide. Como dijo el presidente, que ningún acuerdo sea un ajuste sobre esta recuperación. Son muchos años de crisis y tenemos que apalancar esa recuperación y encarar también otros problemas que la economía viene trayendo, como la inflación y todos los temas que son parte del desafío económico que queda por delante. Los cuatro años de crisis y la pandemia es algo que trastoca y no tenemos que perder el foco de la dimensión global de este fenómeno. Cuando uno mira al mundo encuentra tensiones de crecimiento, de inflación, de recuperación a nivel global y una discusión muy profunda sobre como funciona la estructura financiera internacional y el rol del fondo y de todos los organismos.
– ¿Una demora en ese acuerdo puede condicionar la actividad del banco?
– No. El banco y el sistema financiero de Argentina están en una situación de solidez. A partir de la crisis de 2001, Argentina tiene una serie de regulaciones y normativas muy contra cíclicas que le dan robustez al sistema financiero así que por ahí no creo que haya ningún problema. El banco está en una situación inédita, con exceso de capital regulatorio, con niveles de liquidez elevados. Entendemos que estamos en una situación de mucha robustez financiera.
– ¿Bajar la inflación sigue siendo el gran desafío?
– Sí, claramente es uno de los temas que hay que encarar. Lo que le pasó a la economía argentina es que el gobierno anterior dejó una inflación en niveles desbocados y eso genera mucha inercia. Y cuando se está encarando esa cuestión, vino la pandemia que trastocó la dinámica inflacionaria en el país y en el mundo. Por supuesto que en la Argentina todo tiene una velocidad distinta porque tenemos esa historia que otros países no tienen.