El atleta argentino registró en su mejor intento 72,10 metros y estuvo lejos de los 12 que se clasificaron a la final.
El bonaerense de Avellaneda, Joaquín Gómez, fue de menor a mayor en la clasificación de la prueba de lanzamiento de martillo en los Juegos Olímpicos de París 2024, aunque de todas maneras no logró clasificarse para la final.
Gómez tuvo un primer intento nulo; en su segunda oportunidad marcó 64,94 metros, y en la tercera y última, envió el implemento a 72,10 metros.
Mejoró, obviamente, pero no le alcanzó. Quedó 14° en el Grupo B, aunque hubiera quedado 10° en el Grupo A.
De cualquier manera, su posición final fue 23°. Clasificaban todos aquellos atletas con 77 metros o más o, en su defecto, los 12 mejores.
El último clasificado resultó el alemán Merlin Hummel, con 75,25. En tanto, los dos mejores registros fueron para atletas canadienses: Ethan Katzberg (79,93) y Rowan Hamilton (77,78, la mejor marca de su carrera).
Vale recordar que Gómez tiene como su mejor registro personal 76,36 metros, obtenido en 2021, en el Parque Olímpico de Buenos Aires.
El atleta argentino, de 27 años, indicó luego de su participación en París: “Son mis primeros Juegos Olímpicos y estoy contento de haber llegado y haber podido participar. Si bien había estado en torneos grandes, nunca en uno de tanta magnitud. Es una experiencia increíble. Trabajé muchos años para estar acá. Entreno hace mucho y fue muy difícil llegar. Es un logro para toda la familia. Mi papá -quien también es su entrenador- está más contento que yo”.
Y vaya si es cierto, según pudo verse en las imágenes de la televisión. Daniel Gómez, quien fue dos veces campeón sudamericano en esta misma especialidad, se mostró exultante y emocionado con la performance de su hijo.