El senador provincial reclama que los postulantes a la gobernación sean bonaerenses. "La Provincia tiene una forma de funcionar, de vivir, que es distinta a la Ciudad de Buenos Aires", aseguró.
El senador bonaerense de Juntos por el Cambio Joaquín De la Torre reconoce sus ganas de jugar en las próximas elecciones para gobernador de la provincia de Buenos Aires, pero sostiene que todavía no es el momento. Igual aclara que el próximo candidato debe ser oriundo porque “no se puede sentir ni amar aquello que no se conoce”.
En su paso por la ciudad, el exintendente de San Miguel bregó por aunar “educación con trabajo” para que el país retome la senda del crecimiento. Este es el diálogo que mantuvo con LA CAPITAL:
-Integró el primer panel de la Pastoral Social “Crecimiento con inclusión”, pero ¿cómo se hace para crecer?
-La Argentina necesita restaurar dos puentes. El primero tiene que ver con la educación y el segundo con las condiciones para generar trabajo. Los últimos años la Argentina ha destruido su sistema educativo, un sistema perverso es dejar de medir, dejar de tomar examen, dejar de calificar, dejar de intentar mejorar con la excusa de que estábamos discriminando a aquellos que no aprobaban. Entonces, terminamos teniendo chicos que no terminan el colegio porque no tienen el incentivo, chicos que cuando terminan no tienen el conocimiento, tal como vemos ahora en los exámenes. Tenemos que volver a recrear el sistema educativo y revincularlo con el trabajo. El segundo puente es generar condiciones para que aquellos que pueden dar trabajo den trabajo. Y en esto, claramente, las empresas medianas y pequeñas y los comercios son los mayores dadores de trabajo. Entonces, debemos reconstruir y repasar si las condiciones que tienen los más grandes deben ser usadas por los más chicos en el tema de dar trabajo.
-Tiene experiencia como intendente y ministro, ahora es senador provincial. ¿Cómo es la convivencia en el Senado bonaerense cuando están 23 a 23 en votos?
-Las herramientas para reconstruir el mundo del trabajo pasan por los acuerdos, pero tienen que ser acuerdos de cara a la gente y no de espalda a la gente. Desgraciadamente, la política en los últimos años no está acostumbrada a construir escenarios para tener mayor cantidad de diálogo. Si nosotros no volvemos a entender que la política es primero convicción y después diálogo, nunca vamos a recrear las condiciones para que en la Argentina haya crecimiento. Aquellos que tienen que tomar decisiones de inversión, que son las que generan crecimiento, necesitan reglas de juego. Y para que haya reglas de juego necesitan saber que tanto oficialismo u oposición, según les toque en su momento, no van a modificar las reglas de los anteriores porque hay una acuerdo previo.
-Habló de acuerdos de espaldas a la gente. ¿Por uno de esos acuerdos es que renunció a la vicepresidencia segunda de la Legislatura bonaerense?
-Eh, sí. Renuncié porque entendí que eso no era una decisión política que favoreciera al espacio al que nosotros representamos, a la gente que nosotros representamos. La gente a la que representamos aspira a que volvamos al gobierno. Nosotros tenemos que mostrar esa aspiración de volver al gobierno.
-¿Piensa que el año que viene van a volver al gobierno?
-Es una decisión de la gente y no me gusta ponerme en ese lugar. Pero si nosotros trabajamos sobre todo en tres cosas -qué vamos a hacer, cómo lo vamos a hacer y cuándo lo haremos-, vamos a hacer un buen gobierno.
-¿Se postularía a gobernador bonaerense?
-Yo tengo vocación de ser gobernador, lo he dicho más de una vez, pero creo que este no es el momento de hablar de candidaturas ni de la política electoral. Es el momento de trabajar en la propuesta, en qué vamos a hacer, cómo lo vamos a hacer y cuándo lo vamos a hacer.
-El año pasado ganaron las legislativas en la provincia de Buenos Aires y después se dispersaron, afloraron las internas. ¿Qué pasó?
-Muchas veces los que toman decisiones no tienen capacidad de escucha. La capacidad de escucha tiene que ver con una cosa que venimos planteando, que es que a la provincia hay que conocerla, sentirla y amarla. No se puede sentir ni amar aquello que no se conoce. La Provincia tiene una forma de funcionar, de vivir, que es distinta a la Ciudad de Buenos Aires. Podés importar candidatos y ganar elecciones, pero después ni la sienten ni la viven ni la aman como se necesita para conducirla.
-Entonces, ¿el candidato a gobernador el año que viene tiene que ser bonaerense?
-Sí. Como el próximo candidato a gobernador de Córdoba tiene que ser un cordobés.