Un grupo de vecinos increpó a la policía y le exigió que detuviera a un hombre de 32 años acusado de robar en la vivienda ubicada al lado de la suya, perteneciente a una mujer con la que habría mantenido una relación comercial.
Un allanamiento en una casa del barrio privado Rumencó terminó con incidentes este martes a la tarde cuando un grupo de vecinos increpó a la policía y le exigió que detuviera a un hombre acusado de robar en una vivienda lindante a la suya.
Todo comenzó en horas de la madrugada del domingo, cuando el sistema de cámaras de seguridad de un inmueble del famoso country captó la secuencia de un robo. En los videos registrados puede observarse cómo un hombre encapuchado y con barbijo entra en la propiedad y sustrae una pequeña caja del interior de un vestidos ubicado en la habitación principal.
Al momento del hecho en la casa no había nadie, pero al otro día la propietaria notó el faltante del objeto en el que, dijo, guardaba 4500 dólares. De inmediato, analizó las imágenes tomadas por las cámaras de seguridad y constató que le habían robado. Pero eso no fue todo: en el acto reconoció al presunto ladrón como su vecino, con quien además la habría unido una relación comercial en el pasado reciente.
El domingo la mujer, dueña de una reconocida farmacia, hizo la denuncia ante la policía y la fiscal Andrea Gómez comenzó a investigar el caso. En ese marco, pidió una orden de allanamiento en la vivienda del acusado, que fue autorizada por la Justicia de Garantías y se llevó a cabo este martes a la tarde, a cargo del personal de la comisaría quinta.
Cuando los investigadores ingresaron al barrio privado, acompañados de los guardias de seguridad, se dirigieron al inmueble en cuestión, en el que entonces no había nadie. Al comenzar con el operativo, no sólo arribó al lugar el sospechoso, junto a su abogado particular, sino que también se reunió en el perímetro de la casa un grupo de habitantes del country que comenzó a increpar a la policía, exigiéndole que requisara y detuviera al hombre.
Finalmente, del interior de la vivienda los uniformados secuestraron algunos pocos dólares que no serían de la misma denominación que los robados y un teléfono celular. El hombre, que es franquiciante de una famosa cadena de heladerías, quedó imputado por el delito de “hurto” y será citado a declarar en los próximos días en Tribunales.
Por el momento, y pese a los disturbios ocurridos en el lugar, no se dictaron medidas restrictivas de su libertad.
Según pudo saber LA CAPITAL tras consultar fuentes del caso, en las imágenes registradas por las cámaras de seguridad -inclusive una fue robada por el hombre- puede distinguirse una cadena de oro que sería la misma que lucía este martes el acusado y también posee en su fotografía del documento de identidad.