La madre de los menores fue imputada y embargada por 500 mil pesos.
Los chicos tienen 15, 11 y 5 años. Fue el mayor, que sufre un retraso madurativo, quien sin querer dejó al descubierto el horror del que eran víctima los tres hermanos en su casa. Un día en la escuela, al no poder controlar sus esfínteres, el maestro que lo ayudó a limpiarse notó que tenía verrugas en su zona íntima y pidió la opinión de un médico. El diagnóstico fue sífilis, y apenas la punta de una trama de abusos como nunca se había conocido en la provincia de San Juan.
Las autoridades se comunicaron con el padre biológico de los alumnos y a él le confesaron finalmente que su mamá, una mujer de 38 años que en las últimas horas fue imputada por la justicia, abusaba y prostituía a los tres y además tenía sexo con un perro de raza pitbull delante de ellos.
Los abusos ocurrían en dos domicilios y habrían empezado hace al menos nueve años. Los hijos menores dijeron que a veces los dormía con remedios y en el caso de la nena, la menor de los tres, sufrió hemorragias pero nunca recibió asistencia médica. El relato de los chicos, además de doloroso, fue dado por cierto por las profesionales del Centro Judicial de Abordaje Integral de Niños, Niñas y Adolescentes Víctimas (ANIVI) que los entrevistaron.
La mujer quedó imputada por el delito delito de “Abuso sexual con acceso carnal reiterado; agravado por el vínculo en concurso ideal con corrupción agravada de menores” y además, la embargaron por 500 mil pesos.