Hasta el momento, la cantidad de decesos por la pandemia alcanza los 2.220. La cantidad de infectados es de 122.524 en el país.
Otras 42 personas fallecieron en las últimas 24 horas y se sumaron 3.223 nuevos contagios de coronavirus en la Argentina, con lo que la cantidad de decesos alcanza los 2.220 y a 122.524 los infectados desde el inicio de la pandemia en el país, informó el Ministerio de Salud de la Nación.
En el reporte matutino, se informaron 26 nuevas muertes. 16 hombres, 11 de 58, 57, 45, 63, 92, 81, 59, 0, 65, 68 y 94 años, residentes en la provincia de Buenos Aires; 3 de 63, 77 y 75 años, residentes en la Ciudad de Buenos Aires (CABA); uno de 79 años, residente en la provincia de Río Negro; uno de 67 años, residente en la provincia de Chaco; y 10 mujeres, 2 de 37 y 70 años, residentes en la provincia de Buenos Aires; 7 de 81, 71, 70, 89, 92, 89 y 68 años, residente en la Ciudad de Buenos Aires (CABA); y una de 50 años, residente en la provincia de Chaco.
“Si alguna de las variables que analizamos prende las luces de alarma, vamos a tener que continuar con esta política de cuidar la vida, y vamos volver para atrás si es necesario”, advirtió el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, en el día después de los anuncios sobre la siguiente etapa de la cuarentena.
Con las cifras anunciadas oficialmente esta noche, el número total de decesos ascendió a 2.220 y los contagiados llegaron a 122.524 desde el inicio de la pandemia, en marzo pasado.
La cartera sanitaria detalló, además, que son 824 los internados en unidades de terapia intensiva, con un porcentaje de ocupación de camas de adultos de 54,4% en el país y del 63,9% en el AMBA.
De los casos registrados hoy, la provincia de Buenos Aires sumó 1.817 ; la Ciudad de Buenos Aires 1.105; Chaco 60; Chubut 8; Córdoba 22; Entre Ríos 15; Jujuy 7; La Rioja 17; Mendoza 44; Misiones 1; Neuquén 16; Río Negro 25; Salta 7; Santa Cruz 20; Santa Fe 36; y Tierra del Fuego 22.
En tanto, la nueva etapa de la cuarentena comprende una apertura escalonada de actividades y servicios, y funcionarios de tres administraciones (Nacional, provincia de Buenos Aires y ciudad de Buenos Aires) coincidieron en aclarar que si se “prenden alarmas” en la evolución de la pandemia “se volverá para atrás” con las flexibilizaciones.
Al respecto, Cafiero, remarcó que “en esta etapa que va desde hoy hasta el 2 de agosto es necesario tener una gran responsabilidad individual como garantía para cuidar de uno mismo y del otro”.
A su turno, el Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, señaló que se debe “aprender a convivir con el virus con responsabilidad” y aseguró que, además de los controles y los cuidados que lleva adelante su gobierno “también está en juego la actitud de los vecinos”.
Añadió que el comportamiento en general de la sociedad “hasta ahora ha sido muy bueno”, pero advirtió que “si hacemos pavadas, vamos a tener que retroceder”.
El titular del Ejecutivo de la Ciudad de Buenos Aires pidió a los porteños “tener especial cuidado” ante el Día del Amigo, que se celebrará el próximo lunes, y solicitó evitar reuniones y encuentros presenciales en esa fecha.
La vicegobernadora bonaerense, Verónica Magario, sostuvo a su vez que “no debemos relajarnos porque aún no superamos el virus” y exhortó a la población a “respetar las medidas sanitarias”.
En la misma línea, el jefe de Gabinete provincial, Carlos Bianco, aseguró que esta nueva etapa escalonada “es prueba y error” y si “la cosa marcha bien podemos mantener este ritmo de apertura”.
“Si las cosas marchan muy bien, podemos incrementar las aperturas. Pero si se complica y la ocupación de camas aumenta, vamos a tener que dar marcha atrás”, aclaró Bianco en declaraciones periodísticas.
También la ministra de Gobierno bonaerense, Teresa García, opinó que esta reapertura “la tenemos que hacer todo muy lento y paulatinamente, porque estamos mirando permanentemente el crecimiento de casos y de los días de multiplicación de contagios”.
En el plano internacional, el coronavirus siguió golpeando hoy de un extremo al otro del mundo con récord de contagios en un día y más de 14 millones de casos positivos en total, con la vuelta a fuertes restricciones por rebrotes en países que creían haberlo controlado, como España e Israel, y un avance sostenido en gran parte de América impulsado por Estados Unidos y Brasil.
Más de 237.000 nuevos contagios fueron registrados en el mundo en las últimas 24 horas, con una curva que sigue sin hallar techo en cinco continentes, informó hoy la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Aunque los casos positivos siguen en ascenso, las muertes globales, que suman ya al menos 593.087, se mantienen desde hace más de dos meses en torno a las 5.000 diarias, agregó el organismo de salud de la ONU.
Según el registro en línea de la Universidad de Johns Hopkins de EEUU, el planeta superó hoy los 14 millones de casos positivos y se acercaba velozmente a las 600.000 muertes.
Expertos coinciden en que las cifras reales de contagios son mayores por varios motivos, incluyendo una capacidad limitada de testeos en muchos países y el hecho de que estudios muestran que gran cantidad de las infecciones no provocan síntomas.
Europa superó hoy la barrera de los tres millones de casos, aunque la región más afectada del mundo sigue siendo América, con 7,3 millones, mientras que Medio Oriente y el sur de Asía registran 1,3 millones cada una, de acuerdo con la OMS.
Más del 80% de los fallecimientos se siguen concentrando en América y Europa, con unos 302.000 en el primero de estos continentes y 205.000 en el segundo, siempre según las estadísticas de la OMS, informó la agencia de noticias EFE.
Estados Unidos es el país más afectado en el planeta, con 3,5 millones de casos, seguido de Brasil, que superó la barrera de los dos millones, India (un millón de contagios), Rusia (764.000), Perú (345.000), Sudáfrica (337.000), México (331.000) y Chile (328.000).