"La Emulación del Infierno y sus Placeres" no se queda en la melancolía sino que apela a la reflexión. "Nosotros tenemos una frase: Lo que les pasaba a los Redondos le pasaba al país y lo que le pasaba al país, le pasaba los Redondos" definió el guionista y actor Fernando Casas.
Entre el documental, el show musical y una puesta teatral-circence, “La Emulación del Infierno y sus Placeres“, llega a Mar del Plata para homenajear a Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota. La función será este sábado, 21 de septiembre, a las 21 en el Centro de Arte MDP.
El tercer espectáculo de este equipo numeroso y multidisciplinario no se queda en la melancolía sino que apela a la reflexión. “Nosotros tenemos una frase: Lo que les pasaba a los Redondos le pasaba al país y lo que le pasaba al país, le pasaba los Redondos” aseguró Fernando Casas, guionista y actor de la propuesta.
De esa forma resumen cómo la historia de Los Redondos, está íntimamente relacionada con la historia de la Argentina. “Es como un documental teatralizado, donde hay una banda en vivo, un relato histórico, social, político, deportivo, que va llevando el cuento de lo que ocurrió en los 25 años entre 1976 y el 2001 ¡vaya 25 años para el país! con imágenes, algunas inéditas, con clips que te sitúan en tiempo y espacio, en un relato cronológico desde la dictadura hasta la explosión del 2001” resumió Casas.
Más de 15 artistas en escena se conjugan para dar vida a esta propuesta atravesada por las canciones y la historia a través de distintas expresiones artísticas.
“En nuestra primera temporada el espectáculo se llamó ‘Ensayo general’, en la segunda ‘Teatro antidisturbios’. Este es el tercero, mucho más rockero, hemos cambiado bastante, profundizamos con el documental, hay más imágenes, se interactúa con las imágenes y por eso el título es bien nuestro, no ricotero, nuestro y que más o menos resume la vida y la vida con los Redonditos”, definió el guionista.
Mar del Plata, como tantos otros lugares del país quedó ligada a la historia de Los Redondos y el capítulo vinculado a la violencia. “Para tratar de entender, investigamos, hablamos con productores, periodistas, escritores. ¿Qué sucedía en el 99 como para que después de que llegue un tren a Mar del Plata, que venía de Buenos Aires con mil y pico de personas, la policía los esté esperando con balas de goma porque sí? ¿Qué había detrás de eso? ¿Qué se buscaba con ese tipo de violencia, incluso en la Terminal, donde poco puede fundamentar la policía que había disturbios con pibes que recién se estaban bajando de un tren. así que la lectura que hacemos está en el show. Toda nuestra lectura está en el show”, señaló.
“Cada show parece que se hace por primera vez porque nos adaptamos a cada espacio, a cada lugar al que vamos, siempre tratando de encadenar todos los recursos, de manera de hacer algo que no sea literal. No tiene que venir todo servido en bandeja, sino que tiene que haber algún misterio en el mensaje, algo encriptado, algo que te sugiera más que te de una una certeza. Entonces hay performance, hay baile, hay rutinas sobre las canciones y momentos para emocionarse, para reírse, momento para celebrar, momento para bailar, momento para cantar, momento para hacer pogo, hay teatro puro y duro, hay teatro semi ciego. Creo que nuestro mejor truco es ese habernos ordenado en pos de contar la historia no oficial de la banda que no tiene historia oficial de manera diferente, el camino de Los Redondos, el viaje de Los Redondos”, reflexionó Casas.