Familiares y amigos de la joven de 16 años fallecida en 2016, por cuyo caso hay dos vendedores de droga condenados, marcharon a la Catedral y fueron recibidos por el obispo Gabriel Mestre.
La madre de Lucía Pérez, la adolescente de 16 años que murió el 8 de octubre de 2016, aseguró ayer que su hija “hace cuatro años que no tiene Justicia”, y pidió que el nuevo juicio oral ordenado por el Tribunal de Casación bonaerense para los imputados por el hecho, se realice “cuanto antes y sea lo más ágil posible”.
Marta Montero, mamá de la joven, dijo que transita “en paz y tranquila” el cuarto aniversario del hecho, y consideró que el caso de Lucía marcó “un quiebre profundo para que se tomara conciencia de lo que sucede con la violencia de género”.
Montero exigió que la justicia marplatense lleve adelante “cuánto antes” el nuevo juicio oral, tras el fallo de la Sala IV de Casación que el 12 de agosto último dejó sin efecto el veredicto dictado el 26 de noviembre de 2018 por el Tribunal Oral Nº 1.
En esa sentencia, los imputados Matías Gabriel Farías (26), Juan Pablo Offidani (45) y Alejandro Alberto Maciel (ya fallecido) fueron absueltos de los delitos de “abuso sexual agravado por el suministro de estupefacientes seguido de muerte en concurso ideal con femicidio”. En tanto, los primeros dos fueron condenados venderle droga a la joven.
Sin embargo, los jueces de Casación anularon ese fallo, tras la apelación de la familia y de la Fiscalía General marplatense, porque consideraron que continuaba “perpetuando estereotipos de género, decidiendo arbitrariamente y sin una derivación razonada de las constancias”.
“Sabemos que esto es largo y no va a ser de un día para el otro, pero exigimos que sea de la manera lo más ágil posible. Pensamos que de esta manera es como tenemos que seguir. Porque yo creo que esto que pasó con Casación es inédito. Que anularan un fallo no es algo normal, sino que marca un precedente. Y si pasó, es porque estaba todo mal hecho”, aseguró la madre de la víctima.
En sentido, consideró que la posibilidad de contar con un nuevo proceso oral “fue una conquista social”, y un “triunfo como sociedad, por haber crecido, por no callarse, y hacerse escuchar”.
“Durante cuatro años luchamos. Conseguimos esto y vamos a seguir luchando”, señaló la madre de la víctima, y definió el caso como “un quiebre a la hora de tomar conciencia”.
“Creo profundamente que hoy se toma otra conciencia de las cosas, y está claro que como le pasó a Lucía le puede pasar a cualquiera. Y lo importante es que el otro se dé cuenta de que esto no es casual, que hoy le pasó a ella y mañana te pasa a vos”, aseguró.
Impacto entre las mujeres
Montero subrayó a su vez el impacto que el caso tuvo en las luchas del Movimiento de Mujeres: “Quedó claro que si no salimos a luchar por nuestros derechos, si nosotros no tomábamos la posta, nadie la va a tomar por nosotras”.
“Creo que acá lo que se pasó fue que llevó a las mujeres a animarse, mujeres de todas las edades, a decir que tenemos que salir y hablar por Lucía, pero también por nosotras. Porque mañana no sé si voy a estar. Si en lo que va del año llevamos más de 200 víctimas, ¿qué es esto que está pasando? Bueno, salgamos, y es ahí donde tenemos que estar todas juntas, y reclamar nuestros derechos. Y después de lo de Lucía, eso ha sido manifiesto”, dijo.
Si bien la pandemia por el nuevo coronavirus impidió la realización de actos multitudinarias como ocurrió en los tres años anteriores, los allegados de la joven y el colectivo de mujeres impulsaron una radio abierta con familiares de otras víctimas de casos de violencia de género, frente a la Catedral.
La madre de Lucía explicó que decidieron incluir además la convocatoria a una marcha “con barbijos” hacia los tribunales marplatenses, para realizar una acción “más reflexiva”, para mostrar junto a otras familias “qué pasa cuando estos casos ocurren y dejan todo un tejido familiar y social desmembrado”.
En cuanto al nuevo juicio ordenado por Casación, si bien las abogadas de la familia de la víctima estimaron que podría realizarse en el segundo semestre de 2021, primero deberán resolverse las apelaciones presentadas ante la Suprema Corte bonaerense por la defensa pública de Farías y Offidani.
En un nuevo juicio, solo serán dos los imputados, ya que Maciel, el hombre acusado de haber encubierto el femicidio y abuso sexual, falleció a raíz de una enfermedad semanas antes del fallo de Casación, por lo que se extinguió la acción penal en su contra.
En caso de no prosperar la apelación ante el superior tribunal provincial, fuentes judiciales precisaron que existe la posibilidad de intentar un “recurso extraordinario federal” por parte de la defensa, ante la Corte Suprema de la Nación.
Una vez que el fallo de Casación quede firme, deberá sortearse un nuevo tribunal en Mar del Plata, que no podrá ser el Nº 1, y las partes informarán en una audiencia preliminar cuáles son los testigos y las pruebas que serán usados en el segundo juicio oral.