La senadora negó su ingreso al gabinete y elogió la tarea de Triaca como ministro. Defendió su actuación al frente del SOMU y habló sobre la nececesidad de impulsar reformas en el sindicalismo. "Hay sindicalistas que han sido impunes durante mucho tiempo", sostuvo.
Galdys González desechó por completo la posibilidad de suceder a Jorge Triaca al frente del ministerio de Trabajo. “Son versiones infundadas”, le dijo a LA CAPITAL la senadora nacional por Cambiemos, quien además, defendió la continuidad del funcionario.
“Tal como lo dijo el Jefe de Gabinete, el Presidente no opina que haya un motivo para su remoción. Por lo tanto considero que se lo ha reconfirmado, así que no tengo ninguna otra cosa que decir”, sostuvo la legisladora bonaerense.
De este modo González salió al cruce de las versiones que la mencionaban como candidata a sustituir al Ministro, tras la controversia desatada por las acusaciones de su empleada, Sandra Heredia.
Además, la legisladora respondió a las denuncias presentadas por la defensa del ex líder del SOMU, Omar “Caballo” Suárez, en relación a su actuación como interventora de ese gremio entre 2016 y 2017.
Según dijo, todas las constancias de sus decisiones en ese cargo están en la Justicia, que fue la que ordenó la intervención del sindicato marítimo, para que sean consultadas.
“De lo que hay evidencia absoluta es de que Suárez ha sido el jefe de una asociación ilícita que hizo negocios con el gobierno anterior”, afirmó.
De vista en Mar del Plata, este jueves González recorrió obras de pavimentación en la zona de Parque Camet y la ong Casa Fraterna, en el barrio Los Pinares.
“En estos 20 días Mar del Plata está teniendo una temporada muy buena, que es una señal de una economía en la que hay signos de crecimiento, de una inflación en baja y un reactivación del empleo”, sostuvo.
“El programa económico está en el sendero correcto y los índices macroeconómicos se están moviendo en la dirección adecuada”, agregó.
-No obstante, uno de esos índices, el poder adquisitivo, sigue siendo motivo de disputa con el sector gremial. ¿Cómo vislumbra el proceso de discusión paritaria de este año?
-He visto desde el primer día una mesa de diálogo entre el gobierno, los sindicatos y los trabajadores con acuerdos para que los trabajadores no pierdan frente a la inflación. Espero que este año se dé la misma lógica. A esto se le suma que en marzo vamos a iniciar en el Congreso el debate por una reforma laboral que tiene que ver con el blanqueo, porque hay más de 4 millones de argentinos en la informalidad. Así que esperamos poder debatir con tranquilidad este tema.
-Algunos sindicalistas consideran que el gobierno los está “acorralando”. ¿Es así?
-Hay que separar el accionar de la Justicia de lo que tenga que ver con el diálogo entre el gobierno y el sindicalismo. Valoramos el rol del sindicalismo porque forma parte de nuestra tradición institucional. Pero repudiamos el sindicalismo que se ha enriquecido a costa de los trabajadores, que ha sido corrupto teniendo la venia y la complicidad de los que estaban gobernando. Celebramos que haya una Justicia que avance con firmeza y sin que haya un Ejecutivo que le diga lo que tiene que hacer. Si la Justicia avanza es porque tiene las manos libres para investigar y aplicar penas.
-Sin embargo al sentirse “acorralados”, algunos sindicalistas parecen dispuestos a elevar la tensión con el gobierno…
-Eso ocurre porque hay sindicalistas que han sido impunes durante mucho tiempo y llevan su situación personal hacia la discusión de los trabajadores. Espero que esos sindicalistas manchados por el delito y la corrupción no vayan a la mesa de negociación con sus problemas personales. Si están tan limpios de conciencia deben dar cuentas ante la Justicia. Algunos hablan de persecución política, como lo ha hecho el “Caballo” Suárez. Pero se han probado a todas luces los delitos que ha cometido. En este país están garantizados los derechos de todos los ciudadanos, sin ningún tipo de persecución. Tenemos el caso del “Pata” Medina o de Balcedo, que lamentablemente son representantes de un sindicalismo que no queremos más en la Argentina. Su actuación no sólo causó daños en sus sindicatos y sus afiliados, sino también en el conjunto de la sociedad, a partir de negociados explícitos con los gobiernos. Cuando se saca a esos personajes del medio se beneficia a la sociedad, ya que se evita el costo de la corrupción.
-¿Existe en la agenda algún planteo de reforma institucional del sindicalismo?
-Ya hemos dado algunos primeros debates sobre la renovación, porque es conocido que la mayoría de los dirigentes sindicales ya llevan más de 20 años en el poder. Los sectores más jóvenes del sindicalismo aspiran a eso. Es una discusión que se está dando y sobre la que hay cierto nivel de consenso, de parte de algunos sindicalistas, sobre cuestiones de género o de transparencia. Una de ellas tiene que ver con las declaraciones juradas de los gremialistas para explicar sus patrimonios. Esta una discusión necesaria, que parte del sindicalismo está dispuesto a dar. Es un tema que está en nuestra agenda, a lo que se le suma una gran presión de la opinión pública, que nos marca a todos que ya no da lo mismo hacer las cosas bien o mal.
-A partir de la situación del ministro Jorge Triaca la defensa de Omar Suárez ha pedido investigar su actuación al frente del SOMU. ¿Qué piensa de eso? ¿Cuál ha sido su relación con Sandra Heredia?
-De lo que hay evidencia absoluta es de que Suárez ha sido el jefe de una asociación ilícita que hizo negocios con el gobierno anterior. En mi caso, estuve como interventora entre febrero de 2016 y febrero de 2017. Yo no conozco a Sandra Heredia y ella fue designada en abril de 2017. En relación al ministro Triaca, él ha salido a pedir disculpas por lo que pasó y a corregir su error. Lo que debo decir es que cuando llegamos con la intervención, el sindicato tenía una deuda de 5 millones de pesos y cuando me fui, quedó con un superavit de 127 millones. Cortamos todos los negocios y los curros de Suárez dentro del sindicato, donde había desvíos de los aportes de los afiliados a sus empresas. Por lo demás, al estar al frente de una intervención judicial informamos de todo lo que hicimos mes a mes al juez Rodolfo Canicoba Corral. Por eso, para todo lo que se quiera saber sobre lo que sucedió, se puede acudir al juzgado. Además, el equipo auditor técnico que ingresó conmigo en la intervención se fue conmigo cuando yo me fui. No hice un seguimiento sobre lo que sucedió después.
-¿Qué opina sobre la continuidad de Triaca como Ministro?
-Lo considero un gran Ministro de Trabajo. Han sido dos años difíciles durante los cuales se han cerrado paritarias sin mayor conflicto, se ha acompañado a las pymes con programas de empleo y se ha trabajado en la cuestión social. Lo conozco y sé de su honestidad y capacidad. Salió a reconocer su error y a subsanarlo. Tal como dijo el jefe de Gabinete, el Presidente no opina que eso sea motivo de una remoción. Por lo tanto considero que se lo ha reconfirmado, así que no tengo ninguna otra cosa que decir.
-Se ha mencionado su nombre para sucederlo…
-Son versiones infundadas. No hay nada de eso.
-¿Cree que hay posibilidades de acuerdo con la ex Presidenta dentro del Senado, teniendo en cuenta que ambas, al igual que Esteban Bulrrich, representan hoy los intereses de la Provincia de Buenos Aires?
-Muchos senadores de diferentes provincias han tenido actitud de dialogo y consenso más allá de las diferencias. Pero en este caso resulta difícil imaginarlo. Por la primera participación que la ex Presidenta tuvo en la primera sesión, no creo que vaya a tener una actitud constructiva. Sabemos que ella es oposición y que no está de acuerdo con lo que hacemos. Desearía que cuando sea necesario se sentara a conversar, por el bien de la Provincia y de los bonaerenses. Pero el diálogo no parece ser su fuerte. Igual uno siempre espera lo bueno del otro.
-¿Qué impacto cree que tendrá en la Provincia la mejora de la coparticipación conseguida a fines de año en el Congreso por el gobierno de Vidal?
-Ese fue un enorme logro; un acto de Justicia porque era injusto que la Provincia recibiera tan poco aportando tanto. No solo va a beneficiar en obras al conurbano sino también a las localidades del interior, como es el caso del Mar del Plata. Habrá más recursos para obras básicas, para generar empleo y obras de infraestructura hidráulica. Esto lo logró una gobernadora que se animó a reclamar esto en la Justicia y que se paró delante de otros gobernadores, con el apoyo del Presidente Mauricio Macri. Es un logro importante e histórico. Ahora eso tiene que ir acompañado con el esfuerzo de los municipios, para que así como la Provincia adhirió al pacto fiscal, ahora las comunas adopten criterios de responsabilidad para cuidar cada centavo de los contribuyentes.
