El entrenador del "Torito" no ocultó su asombro por el poder de convocatoria de su equipo. Y se le anima a la posibilidad de jugar el Reducido. "Desde el primer día les dije a los jugadores que venía a clasificar", afirmó.
Gabriel Gómez, el DT del cambio de timón que ilusiona a todos los hinchas de Alvarado, vivió con una serena alegría el día después del gran triunfo sobre Aldosivi en el tan esperado clásico por todo el pueblo del “Torito”.
“Pasé un lunes muy tranquilo, muy feliz. El domingo vivimos una fiesta muy linda y terminó muy bien. Creo que la gente de Alvarado se lo merecía. Fue impresionante la cantidad de público que fue a la cancha y ver a los chicos festejar con ellos me puso muy bien. Los jugadores también se merecían una alegría así. Tenemos un gran grupo humano”, le dijo Gómez a LA CAPITAL.
-¿Qué te sorprendió de lo que rodea este clásico?
-La cantidad de gente que fue a la cancha. Lo había enfrentado en otras ocasiones. Yo sabía que Alvarado era popular, pero no que tenía tantos hinchas. Lo hablaba después del partido con los dirigentes. Llevo muy poco en Mar del Plata y de verdad no podía creer ver tanto público.
-¿Qué resorte tocaste para que el equipo diera este vuelco en los últimos tres partidos?
-Modificar el sistema, muchas charlas con los jugadores y trabajar. No hay secretos. Y hay otra cosas. Los buenos resultados nos ayudaron a recuperar la confianza. Siempre los triunfos aceleran los procesos. Creo que nuestro andar va de menor a mayor y el pico fue el primer tiempo del clásico. Creo que fue perfecto. Merecimos un gol más y no me estoy refiriendo al penal que atajó Carranza. Antes del gol de Becker, habíamos generado varias chances. Los chicos tienen los pies en la tierra, pero se van convenciendo de que pueden.
-¿Siempre armás tus equipos de atrás hacia adelante?
-No necesariamente. Pero hicimos un análisis del equipo y llegamos a una conclusión. Cuando perdía la pelota, tardaba en reaccionar. De ahí el cambio de sistema. Trabamos sobre la idea de recuperar y atacar rápido y de presionar rápido hacia adelante. Ante Aldosivi ejecutaron muy bien cuándo presionar y cuándo retroceder y además ganaron los duelos individuales.
-Becker creció mucho en los últimos partidos, ¿hubo alguna charla especial con él?
-Es un jugador talentoso y a los talentosos hay que entenderlos. También hay otra cuestión: él vino a mitad de año y de a poco se fue poniendo bien desde lo físico. Ahora está haciendo buenos partidos y pasó a ser muy determinante. No sólo por el gol de ayer, también dio asistencias en partidos anteriores.
-¿El plan original de juego ante Aldosivi fue el que se vio o el viento a favor reforzó sus intenciones de atacar?
-El viento juega a favor sólo si lo sabés utilizar. El primer tiempo salió tal como lo habíamos pensado y los chicos supieron entender los distintos momentos que tuvo el juego. Y además manejamos bien la pelota parada a favor y en contra.
-No sé cuál era tu idea cuándo asumiste el cargo. ¿Cambió el objetivo después de estos tres partidos?
-No porque yo desde el primer día les dije a los jugadores que venía a clasificar al Reducido. Pude hacerlo con mis equipos anteriores y quiero hacerlo con Alvarado.
-¿Qué le mejorarías al equipo?
-Si me dejo llevar por el primer tiempo del domingo, por ahí diría que no tantas cosas. Pero, en realidad, sí, hay mucho por mejorar todavía. Por ejemplo, tenemos que ser capaces de utilizar juego de posesión cuando se necesita. Yo creo que ahora debemos mostrar que lo nuestro en este arranque no fue casualidad.
-Tenés una trayectoria importante, ¿puede que el del domingo haya sido uno de los días más felices de tu carrera?
-Tuve muchos días muy felices y también muchas decepciones. Pero este triunfo del domingo fue uno de los días más lindos que tuve como entrenador.