Los hinchas se acercan al predio donde entrena Aldosivi para tener una foto o un autógrafo con el ídolo, desde la semana pasada entrenador del elenco marplatense en la Liga Profesional.
Néstor Gambini, jefe de prensa de Aldosivi y quien ofició de nexo para concretar la nota, cuenta que todos los días se vive algo parecido en la salida del entrenamiento. Y que Palermo se presta amablemente a los pedidos de fotos y autógrafos de los hinchas. Como el propio Martín dice en el cuerpo principal de esta nota, él extrañaba ese afecto de la gente.
Tras el entrenamiento y el almuerzo con el plantel en el predio, Palermo llega a horario para concretar la entrevista exclusiva pautada con este medio. Pero en el trayecto surgen algunas demoras.
Dos techistas que hacen refacciones en el salón de usos múltiples lo paran para hacer un par de fotos y Martín acepta. Y tras ellos, en el camino hacia la oficina que Gambini preparó para poder hacer la entrevista, algunos chicos de las inferiores del club y socios que están dentro del predio también se arriman para retratar un momento junto al goleador ahora entrenador.
Mariano, ataviado con indumentaria de Aldosivi se reconoce también hincha de Boca. Fibrón negro en mano le pide a Palermo que le firme la pierna donde luego lucirá un tatuaje.
Otro hincha, visiblemente emocionado le confiesa que es el ídolo de su vida y le pide un autógrafo en el libro biográfico “Palermo, Titán del gol y de la vida”, escrito por el colega Miguel Bossio.
Algunos más lo aguardan fuera del predio.
Puertas adentro, los empleados del club, están muy contentos con la personalidad y el buen trato que tiene para con ellos el nuevo entrenador. Algunos, por lo bajo, recuerdan que no hace mucho tiempo la situación era completamente distinta.