San Lorenzo esta vez marcó grandes diferencias. Fue un recital ofensivo del bicampeón, con seis jugadores en dos dígitos anotadores. El equipo marplatense poco pudo hacer. De todos modos, los hinchas reconocieron el esfuerzo y despidieron al equipo con aplausos.
Por Sebastián Arana
La concurrida función de domingo fue la última de la temporada para Peñarol. Más de dos mil de sus seguidores alentaron ruidosamente al equipo en este cuarto partido caído del cielo ante San Lorenzo. Pero esta vez el bicampeón no dio oportunidades y se impuso 107-90 para avanzar a los cuartos de final de la Liga Nacional de Básquetbol y ponerle punto final a esta nueva aventura “milrayitas”.
La apuesta defensiva inicial peñarolense no salió. Procuró proteger su canasto y propuso constantes ayudas para atajar los rompimientos rivales al canasto. Por ende, se expuso a los “bombazos” desde el perímetro.
El problema fue que en los cuatro minutos iniciales San Lorenzo anotó cuatro de los cinco tiros de tres puntos que intentó y sacó diez puntos de ventaja: 16-6.
Leo Gutiérrez tuvo que gastar rápido su primer tiempo, pero la defensa no mejoró. Si, en cambio, entraron en sintonía Gianella, Brown y Pettigrew, poco participativos en ese arranque. La ofensiva local ganó en fluidez.
Esa mejoría, sin embargo, no subió al marcador. Por los problemas defensivos apuntados. San Lorenzo jugó cómodo ese primer cuarto y se lo llevó 33-22.
El segundo fue mejor para los “milrayitas”. Como Gonzalo García le dio todo el cuarto a Joel Anthony, el menos ofensivo de sus pivotes, Peñarol jugó varios minutos sin un “5” natural y, con peones más móviles, ajustó mejor la defensa sobre el perímetro.
San Lorenzo empezó a fallar desde lejos y, paulatinamente, con el ingresado Guaita muy certero con sus lanzamientos de tres puntos, Peñarol comenzó a descontar terreno. Tanto que se puso a sólo tres (41-44) a falta de dos minutos y medio para el descanso.
El equipo visitante capeó el temporal con la media distancia de Deck, autor de ocho puntos en los peores momentos para los suyos. Y logró irse 50-43 al frente al entretiempo.
El regreso del cubano Justiz Ferrer al partido en el tercer cuarto puso a Peñarol en problemas. El equipo marplatense no se cerró tanto sobre el caribeño. Y San Lorenzo lo habilitó con asiduidad. En dos minutos, entre él y Tucker hicieron un destrozo: la ventaja visitante trepó a 60-43 en dos minutos.
Los locales salieron de ese brete apretando los dientes y con su mejor pasaje ofensivo del partido. Con mucho gol de Leiva en el poste y buenos pasajes de Pettigrew y Brown. En menos de cinco minutos Peñarol anotó veinte puntos y se puso apenas 63-67 abajo.
El derroche de energías, sin embargo, le pasó facturas. Un par de distracciones defensivas, que San Lorenzo le hizo pagar para llegar 78-70 al frente al cuarto final. Lo peor: Leiva y Guaita cargados con cuatro faltas personales cada uno.
La esperanza que trajo un nuevo triple de Guaita en el comienzo del último cuarto se diluyó enseguida. Esta vez, sin “5” en cancha, San Lorenzo se decidió a atacar el aro y le sacó buen partido. Aguirre hizo un par de aportes claves y los suyos llevaron la renta nuevamente a un inalcanzable 90-73 a falta de siete minutos.
Obligado a tirar de tres puntos, Peñarol fue fácil presa de un rival más sereno y que jugaba ya con una gran ventaja a favor. La peleó hasta el final, pero ya no había forma. De contraataque, con Aguirre brillante y Deck incontenible, la visita se floreó en el tramo final.
San Lorenzo se llevó el partido y la clasificación. Para Peñarol fue despedida. Digna. También previsible. Maquillada con el aliento de sus hinchas aún después de terminado el partido. Pero no por ello menos dolorosa.
Síntesis
Peñarol (90): N.Gianella 8, T.Brown 15, S.Pettigrew 18, A.Diez 6 y M.Leiva 13 (FI); N.Zurschmitten 9, E.Okoye 2, D.García 0 y D.Guaita 19. DT: Leonardo Gutiérrez.
San Lorenzo (107): N.Aguirre 16, S.Safar 17, D.Tucker 16, G.Deck 29 y J.Justiz 11 (FI); J.Vildoza 3, J.Anthony 13 y M.Sandes 2. DT: Gonzalo García.
Estadio: Polideportivo “Islas Malvinas”.
Arbitros: Alejandro Ramallo-Oscar Britez-Alberto Ponzo.
Parciales: 22-33, 43-50 y 70-78.