Paridad sin tantos entre Racing e Independiente. Los locales estuvieron más cerca cuando ingresaron Romero y Lisandro López. El arquero Martín Campaña, del elenco "rojo", fue figura. Cuestionamientos a Beligoy por dos supuestos penales, uno por bando.
Racing Club e Independiente empataron sin goles en el clásico de Avellaneda, válido por la duodécima fecha del campeonato de Primera División, que tuvo un tiempo para cada uno y jugadas polémicas en el estadio Presidente Perón.
El equipo local, que guardó futbolistas para el compromiso del miércoles por la Copa Libertadores de América, mejoró en el segundo tiempo con los ingresos del paraguayo Oscar Romero y Lisandro López, pero no le alcanzó para ganarlo.
Independiente, por su parte, tuvo situaciones de gol en la primera parte pero en el segundo tiempo se cayó y salvó el punto por la buena actuación del arquero uruguayo Martín Campaña.
El elenco “rojo” desperdició una buena oportunidad de seguir cerca de la punta y quedó a cuatro unidades de Godoy Cruz de Mendoza y San Lorenzo, al que recibirá el próximo viernes en el estadio Libertadores de América en un duelo clave en la lucha por el título.
En cambio, la “Academia”, que por el torneo local suma cuatro partidos sin ganar con tres empates y una derrota, dejó una buena imagen sobre el final de cara al partido del próximo miércoles ante Atlético Mineiro, de Brasil.
El árbitro Federico Beligoy también fue protagonista del clásico de Avellaneda ya que en dos acciones con supuestas manos adentro del área, una de Germán Voboril y otra de Gustavo Toledo, decidió no cobrar penal.
El trámite empezó mejor para Independiente en el primer tiempo porque tuvo más la pelota, manejó el desarrollo de un partido que se jugó mayormente en el campo de juego de Racing.
En el segundo tiempo arrancó mejor Racing, más adelantado en el campo y además recuperó la zona media, en contraposición a lo mostrado durante la primera etapa.
Sin embargo, con el transcurso de los minutos, Independiente equilibró las cosas y compartió la tenencia del balón con el local.
Con el ingreso del paraguayo Oscar Romero, Racing volvió a tomar posesión de la pelota, se hizo dueño del trámite del partido e hizo jugar a sus compañeros que, junto a él, inquietaron al arquero Campaña en varias oportunidades desde tiros de media distancia.