Fue uno de los referentes más influyentes del diseño. En la década del 60 lanzó su invención del encendedor de chispa, que recibió el nombre de Magiclick porque encendía la llama con solo pulsar un botón.
El diseñador industrial argentino Hugo Kogan, célebre por su invención del encendedor de chispa que se popularizó con el nombre de Magiclick, falleció en la ciudad de Buenos Aires, a los 88 años.
Kogan fue uno de los referentes más influyentes del diseño argentino y sudamericano, tanto por su labor internacional y recientemente fue distinguido como Personalidad Destacada en el ámbito de la ciencia y la tecnología por la Legislatura porteña.
Uno de sus trabajos más conocidos, es el invento del Magiclick, por el cual obtuvo gran reconocimiento. Fue creado por Hugo Kogan en 1963, mientras se desempeñaba como director del departamento de diseño de la empresa Aurora y recibió ese nombre a que encendía la llama con solo pulsar un botón.
Ese era originalmente el nombre comercial del producto, pero con el tiempo pasó a ser de uso común. La publicidad de la época de su lanzamiento se jactaba de su calidad y también de su extensa duración prometiendo que lo haría “por 104 años”.
Algunos modelos de Magiclick incorporaron luego una carga de gas butano o de otro tipo, que les permite producir y mantener una llama de forma autónoma; mientras que otros se limitan a generar la chispa para encender, por ejemplo, las hornallas de una cocina.
El fallecido diseñador fue además escultor de joven, hizo la escuela industrial y cursó estudios de arquitectura durante dos años, que le sirvieron a la vez para unir la técnica con su afán por las formas.
Kogan diseñó y desarrolló más de un centenar de productos, como máquinas textiles industriales y familiares, equipamiento urbano, electrónica de entretenimiento, hardware, equipos de electromedicina, grandes electrodomésticos y sistemas de equipamiento bancario y ferroviario.
Recibió tres veces el Diploma al Mérito de los Premios Konex como uno de los mejores diseñadores industriales de la década en cada ocasión (1992, 2002 y 2012).
“Con el Magiclick, yo estaba en el momento y lugar adecuados. Una nueva tecnología sobre la que se montó un diseño contemporáneo en un mercado seco de novedades e innovación por muchos años”, había señalado el creativo, cuando inventó su éxito y gran obra.
El emprendimiento lo desarrolló mientras se desempeñaba como director del departamento de diseño de Aurora. El producto nació gracias a la experimentación piezoeléctrica, que en la época era novedosa. Cuando la empresa decidió lanzar el producto, proyectó vender 5.000 unidades por mes, pero el éxito fue tal que terminaron haciéndose pedidos por 80.000 unidades mensuales.
Kogan además fue integrante de la comisión académica designada para la creación de las carreras de Diseño Industrial y Diseño Gráfico en la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Buenos Aires.