El homenaje a 34 años de la guerra que les cambió la vida, encuentra a los ex combatientes de Malvinas, luchando por mantener los logros que, en materia de salud y seguridad social, han conseguido tras grandes luchas.
Los marplatenses que hace 34 años estaban cumpliendo el Servicio Militar Obligatorio y terminaron combatiendo en la Guerra de Malvinas siguen estando en alerta. La lucha por mantener las reivindicaciones y logros -necesarios por su condición de ex combatientes y los problemas que de ello se deriva- es constante y, con los cambios de gobierno, la necesidad de golpear puertas, contar su realidad, mostrar sus programas y la importancia que tienen, se acrecienta.
Este 2 de abril -a 34 años de la guerra que les cambió la vida- los encuentra preocupados y realizando gestiones tendientes a mantener la cobertura del programa de salud mental que fue concebido especialmente para ellos. También por la cobertura social de PAMI en el Hospital Privado de la Comunidad, donde cada vez tienen más restricciones para su atención, además de la cobertura de Anses y, a nivel provincial la situación del IPS y la cobertura de IOMA.
El programa de Salud Mental es un logro del Centro de Ex Soldados Combatientes de Malvinas y no tiene estado oficial. Se realiza en conjunto entre el Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires y el Municipio de General Pueyrredon e incluye la atención psicológica/psiquiátrica de los ex combatientes y sus familias. Si bien la situación pudo ser contenida, desde el centro se mostraron muy preocupados porque el año pasado, como consecuencia de un concurso, quisieron cambiar a una de las profesionales que brinda asistencia, en el marco de ese programa a sus compañeros. “La atención del estrés postraumático no es cualquier cosa, no hay muchos especialistas y, una vez que encontramos una profesional que entiende la situación, nos contiene y hay buena repercusión entre los compañeros, no la pueden cambiar” aseguraron Gustavo Schroeder, Mariano Garbini, Marcelo Cantó y José Lambertini, integrantes de la comisión directiva del Centro.
En ese sentido fueron categóricos: “Las últimas veces que tuvimos un cambio o un problema con esta atención, resultó en casos de suicidio de compañeros” advirtieron. Esta preocupación los llevó a gestionar y conseguir un encuentro con el vicegobernador bonaerense, Daniel Salvador, a quién le plantearon la situación, por el momento contenida, a raíz de una presentación judicial de la propia profesional.
En el caso de la cobertura social -muchos ex combatientes y sus familias tienen PAMI- “estamos con problemas con el Hospital Privado, donde no quieren más cápitas de PAMI y nos hemos encontrado con variadas situaciones, como que no quieran continuar un tratamiento oncológico a la esposa de un compañero” relataron.
En este contexto, los integrantes del centro están manteniendo reuniones “con las nuevas autoridades de PAMI y también de Anses, del IPS y de IOMA, para contarles nuestra situación”.
“Ya tenemos 52, 53, 54 años, estamos grandes y nuestra salud no es similar a la de cualquiera. Está comprobado que los ex combatientes tenemos una expectativa de vida menor a la de otras personas” reflexionaron los referentes del centro, para explicar su preocupación por garantizar una adecuada cobertura de salud para ellos y sus familias.
El Centro de Ex Combatientes tiene un padrón de 230 soldados, pero calculan que, los ex combatientes civiles, en mar del plata -nacidos aquí y otros que se han instalado- rondan los 300 y, contando los oficiales, llegan a unos 400.
“Nuestra situación no es una cuestión de Estado. Durante mucho tiempo nos escondieron y, cada ley, cada logro, cada beneficio que hemos conseguido, ha sido por nuestras gestiones, nuestro trabajo, nuestra lucha” reconocieron.
Gestiones
En ese contexto indicaron que ahora “estamos gestionando la jubilación anticipada para todos los trabajadores estatales ex combatientes. Algunas dependencias públicas, por ejemplo el Banco Provincia, lo tienen. Queremos que sea para todos”.
Por otra parte, los ex combatientes valoraron y reconocieron la “hazaña” de los cuatro deportistas marplatenses que unieron a nado las Islas Malvinas. Y ratificaron su interés por que se cumpla la premisa de la acción, que es la autorización para identificar a los 123 soldados argentinos caídos, cuyos restos “solo conocidos por Dios” se encuentran en el cementerio de Darwin.
“Está todo listo, solo falta la autorización. Están las muestras, está listo el equipo de Antropología Forense, es muy importante para tantas familias” señalaron.
Numerosas actividades
Por otra parte, valoraron las actividades deportivas y de salud que se realizan en su sede de Misiones 3172, que incluyen clases de distintas disciplinas, además de la atención médica casi permanente. “Es un logro que queremos mantener y que funciona también como centro de vacunación. Es un servicio, estamos muy orgullosos” apuntaron.