Durante la manifestación para reclamar justicia por Lucía Pérez, un grupo de manifestantes atacó el edificio donde trabaja el padre de uno de los detenidos.
La escribanía Offidani sufrió un escrache por parte de un grupo de manifestantes que asistieron a la marcha para reclamar justicia por Lucía Pérez, la adolescente violada y asesinada en la ciudad.
El lugar recibió pintadas con aerosol en las que podían observarse frases como “asesino” o “a donde vayas te vamos a buscar”, entre otras.
La escribanía Offidani pertenece al padre de Juan Offidani, uno de los detenidos por el crimen de la adolescente de 16 años.
Testigos de la manifestación aseguraron que cuando los familiares de Lucía se enteraron de este “escrache”, inmediatamente solicitaron que termine la marcha.