El cuerpo de Camila Rodríguez fue encontrado por tres chicos. Los investigadores no descartan ninguna hipótesis sobre la causa de la muerte.
Una adolescente de 15 años que cursaba un embarazo y que estaba desaparecida desde el 24 de abril fue encontrada asesinada a puñaladas cerca de la ciudad de Orán, en el norte salteño, informaron este lunes fuentes judiciales.
La víctima fue identificada como Camila Rodríguez, cuyo cadáver fue hallado en un cañaveral al costado de la ruta nacional 50, frente al colegio María del Rosario ubicado en el citado distrito, a unos 280 kilómetros de la capital provincial.
“Se trata de un hecho grave, en el cual la fiscalía trabaja intensamente a fin de poder lograr el esclarecimiento lo más pronto posible”, dijo la fiscal penal 3 de Orán, Claudia Carrera.
La funcionaria judicial aseguró que “todas las pistas obtenidas hasta el momento son motivo de una investigación profunda y no se descarta ninguna hipótesis”.
El cadáver de la adolescente, según lo informado desde la fiscalía, fue hallado por tres chicos que se habían internado en un cañaveral a mascar cañas de azúcar, y al toparse con el cuerpo en un sendero a 50 metros de la ruta dieron inmediato aviso a sus padres y a la Policía.
Pocos minutos después, efectivos policiales, peritos del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF) y la fiscal se hicieron presentes en el lugar.
Los expertos levantaron distintas muestras para su estudio, entre ellas las larvas que permitirán conocer más detalles sobre la data de muerte de la joven, quien vivía en el barrio Caballito de Orán y estaba desaparecida desde el 24 de abril pasado.
La fiscal confirmó que el cuerpo de la joven sólo vestía una camiseta y presentaba indicios de un accionar violento, por lo que no se descartaba que haya sido víctima de abuso sexual.
En este sentido, los pesquisas determinaron que Camila tenía dos heridas a la altura del cuello y su cuerpo se hallaba en estado de putrefacción.
Además, el personal policial secuestró un arma blanca que será peritado para determinar si posee rastros del o los autores del hecho.
El cadáver fue levantado y trasladado a la morgue del hospital “San Vicente de Paúl”, donde el padre de la adolescente y una tía reconocieron el cuerpo por un anillo que llevaba y por la camiseta que vestía.
Tras la correspondiente autopsia, se determinó que la víctima cursaba un embarazo de entre 6 y 7 meses de gestación.
La fiscal dispuso que las muestras halladas sean peritadas por el CIF, con el objetivo de establecer la existencia de rastros genéticos.
En tanto, se dispuso una serie de pesquisas encaradas por la Policía, para lograr el esclarecimiento del crimen, en cuya causa aún no había detenidos.