El galardón de la Asociación Argentina de Actores reconoció a artistas marplatenses y a Alberto Sava, creador del Frente de Artistas del Borda.
En una ceremonia atravesada por la emoción y por el clima político de una jornada anterior al balotaje presidencial, la Asociación Argentina de Actores -filial local- entregó este sábado los Premios Carlos Waitz, galardones que llevan el nombre del actor marplatense que desapareció en 1977 mientras actuaba en el escenario de La botonera la obra de teatro “Israfel”.
La ceremonia se realizó en el café teatral del Teatro Auditorium y contó con una intervención escénica de las actrices Adriana Derosa, Cecilia Martín y Alicia Falcón, quienes representaron una escena dedicada a Evita Perón.
El músico, director musical y pianista Luis Reales -uno de los más ovacionados de la tarde- recibió una mención de este premio, que hasta el año pasado se entregaba en el marco de la ceremonia de los Premios Estrella de Mar.
El artista recordó que su madre trabajó junto a Carlos Waitz en el espectáculo “Israfel” y llamó a mantener encendida la memoria colectiva. “Carlos Waitz es un símbolo que tenemos que defender, entre otras cosas a la hora de votar”, dijo el pianista, que atesora una rica trayectoria nacional y local.
Fue alumno del gran pianista Manuel Rego, entre otros maestros, varias veces se desempeñó como director invitado de la Orquesta Sinfónica Municipal y de la Banda Sinfónica Municipal, fue director del Teatro Colón y secretario de Cultura marplatense.
La intervención actoral de las actrices Alicia Falcón y Cecilia Martín.
En su faceta nacional, Reales trabajó en las orquestas de Susana Rinaldi y de Rubén Juárez. Y en Mar del Plata fundó el Coro Soles y el grupo la Corte de los Milagros.
Con el premio en sus manos, Reales agradeció a sus hijos y a sus hermanos, de quienes recibe cuidados especiales y un amor filial que lo empodera. Y, entre otras cosas, se mostró de acuerdo con desdoblar el premio Carlos Waitz de los Estrella de Mar para hacer de él un galardón dedicado a las personas que ejercen el arte en Mar del Plata.
Otra de las premiadas fue la actriz y directora de teatro Ana Juárez, quien fue protagonista de la obra “La boliviana”, entre otras, directora del espectáculo musical “Destino tango” y dramaturga de “Chismoseando cuentos”, entre muchas otras obras de las que fue parte.
Emocionada, recordó que su vida está “signada” por los Carlos. Ese fue el nombre de su primer maestro de teatro y también el de su hermano, con quien compartió su primera obra de teatro en la sala Payró de ese mismo complejo.
“Estoy emocionada”, dijo y contó que celebra cuarenta años dedicada al oficio teatral. “Me quedan cuarenta años más, si algo venimos a hacer los artistas a este mundo es a romper las pelotas”, manifestó y recordó el tiempo que le dedicó a este trabajo.
“He dejado muchas cosas en el camino, le resté tiempo a mis hijos pero hay algo que les enseñé: cuando uno tiene una vocación tiene que ir por ella y hacer oídos sordos a los ‘no vas a poder, fijate’. Yo pude, en esta ciudad y gracias a todos ustedes“, agregó.
A su turno, el director de teatro, docente e investigador marplatense Víctor Iturralde -otro de los reconocidos con este premio- agradeció a Mar del Plata el desarrollo de su arte y destacó ser parte de la misma generación de Carlos Waitz, “compartimos época”, dijo.
“Quiero agradecer a la gente de Mar del Plata -siguió- no me van a alcanzar los brazos para abrazar a la gente por el cariño con el que me recibieron”. Y remató, en relación a la necesidad resistencia que llevan adelante los y las artistas: “El triunfo para nosotros siempre va a estar en la lucha”.
En tanto, Alberto Sava, creador del Frente de Artistas del Borda fue otro de los reconocidos en la tarde de ayer.
La distinción fue por su trabajo para sembrar arte en contextos de enfermedad, tal como el que realizó con ese grupo en el Hospital Borda, de la ciudad de Buenos Aires, dedicado a padecimientos psiquiátricos.
Recordó la proeza de organizar festivales artísticos con personas de esa institución. “No existe en el mundo un festival de artistas locos”, observó, en el final de la ceremonia, que estuvo marcada por el clima político de la coyuntura nacional.