Un grupo de comerciantes reclamó que les permitan abrir sus negocios.
Más de un centenar de comerciantes de la calle San Juan reclamaron ayer poder abrir las puertas de sus negocios.
“Obviamente con los respectivos protocolos de seguridad e higiene, a partir del lunes”, explicó Leandro Furundarena, propietario de una joyería.
El reclamo se lo llevaron al intendente Guillermo Montenegro. En el encuentro, que se realizó durante la mañana de ayer en el Centro de Operaciones y Monitoreo (COM), también estuvieron presente Cintia Mendoza y Maria Cuello en representación de los más de cien comerciantes de esa zona geográfica de la ciudad.
Si bien ese mencionado centro comercial cuenta con negocios de distintos rubros, “más o menos el 80 por ciento está con la persiana baja desde que empezó el aislamiento”, añadió el comerciante.
Si bien los emprendedores coincidieron en calificar como “positiva” la reunión con los funcionarios y dijeron estar “conformes”, explicaron que su reclamo se basó en que “se podría abrir”. “En la ciudad no hay circulación interna del virus, desde hace más de 20 días, entonces con ciertas reglas podríamos estar incluidos dentro de la próxima apertura”, añadió María Cuello, propietaria de un comercio de indumentaria masculina de talles especiales.
Si bien cada rubro contará con especificaciones en su protocolo de seguridad e higiene, en forma general los comercios “atenderían en horarios reducidos, con todas las medidas de seguridad como la distancia social en el interior de los locales, aprovisionamiento de alcohol en gel, guantes y tapabocas, entre otros”, enumeraron.
“Estamos conformes porque nos escucharon, estamos contemplados en los protocolos y estaban al tanto de nuestra situación”, contó Cintia Mendoza, propietaria de un local de indumentaria femenina, rubro que en caso de poder empezar a trabajar la semana que viene ya conoce que “las clientas no se podrán probar la ropa antes de comprar y, en caso de devolución, se deberá seguir todo un protocolo”.