Autoridades del Hospital Interzonal expresaron un contundente respaldo al uso del cannabis medicinal. "Estamos convencidos de que era necesaria la implementación de este tipo de tratamiento", aseguró la directora asociada, doctora Verónica Martín.
Las consultas de pacientes que buscan acceder al cannabis medicinal son recurrentes en el Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA), incluso antes de la reciente reglamentación de la ley que abre las puertas a un verdadero cambio de paradigma. En el nosocomio hay “plena voluntad” de lograr el abastecimiento seguro, y certezas sobre la efectividad de este tipo de tratamientos.
La directora asociada del HIGA, Verónica Martín, asistió días atrás a la primera reunión interdisciplinaria en Zona Sanitaria VIII para abordar el tema. “Fue un encuentro muy interesante y positivo que reforzó lo que ya nos veníamos planteando: la necesidad de garantizar el acceso de los usuarios al cannabis medicinal por medio de los organismos públicos”, dijo.
La doctora aseguró que “la demanda seguramente va a crecer” y por eso es “muy importante” coordinar acciones entre las organizaciones, el sistema de salud y el Estado.
“En el hospital vamos a tener que ir dando respuesta para las diferentes patologías en las que está demostrado que funciona el aceite de cannabis”, dijo, pero también advirtió que “habrá que capacitarse y aprender”, como a su vez “construir el camino para que el Estado se provea de cannabis en forma segura”.
“Esto llegó para quedarse y más temprano que tarde se podrá abastecer de cannabis medicinal a los pacientes en el hospital”, garantizó la doctora Martín.
“Desde el HIGA estamos convencidos de que era necesaria la implementación de este tipo de tratamientos. La demanda nos va a ir marcado la cancha y los tiempos”, agregó.
Asimismo, destacó que dentro del staff médico del Hospital Interzonal “la mayoría tiene la cabeza más abierta” y que “no hay tantos profesionales que se muestren tan conservadores” en torno al uso del cannabis, que además de combatir dolencias y tratar enfermedades, “garantiza una mejor calidad de vida”.
La directora asociada del HIGA lo vivió de cerca. “Mi mamá falleció de cáncer hace tres años y en su último año de transitar la enfermedad -ella era farmacéutica- por recomendación de su médico utilizó cannabis con muy buenos resultados: estaba más animada, tenía menos dolores, se alimentaba mejor y descansaba mejor”, contó.
Los ejemplos abundan y tal vez las integrantes de la organización “Mamá Cultiva” sean quienes mayor cantidad de historias guardan en torno a la efectividad del cannabis.
La doctora Martín destacó el trabajo que realizan las organizaciones de cannabicultores, como también el INTA, el Conicet y la UNMdP, y por último indicó: “Esta reglamentación viene a dar un marco regulatorio de algo que ya existe y se usa, pero ahora estará regulado y se garantizará la calidad. Esperamos pronto disponer del recurso en el hospital”.