Jerónimo Rocatti renunció como administrador de la ARM y fue trasladado al Emsur. Gustavo Enciso será el nuevo titular de la agencia y, además, se incorporará una directora. El gobierno municipal explicó que esto se venía planificando "hace tiempo", con el objetivo de encontrar "a quienes pueden pagar las tasas".
Con el objetivo de mejorar la cobrabilidad y así engrosar las arcas locales en medio de la crisis económica, según argumentó el gobierno, este martes se oficializaron un par de cambios en el Gabinete.
Jerónimo Rocatti, quien se venía desempeñando como administrador general de la ARM (Agencia de Recaudación Municipal), dejará su cargo para recalar en el Emsur (Ente Municipal de Servicios Urbanos) como subcontador.
A partir de este mes, la administración de la ARM queda a cargo de Gustavo Enciso, quien era director general del área. A su vez, el Ejecutivo confirmó que se incorporará una directora más en la misma dependencia.
“Se venía planificando hace tiempo. La funcionaria que ingresa tiene misiones plenamente operativas. El objetivo es poder salir a buscar a quienes pueden pagar las tasas y no lo están haciendo, y mejorar así la cobrabilidad del municipio. La idea es trabajar 100% con el personal de la ARM para avanzar con esto”, explicó un integrante del Ejecutivo a LA CAPITAL.
Y añadió: “Con cada cambio buscamos evaluar cómo es el funcionamiento de las áreas del municipio, ver dónde están las fallas de los objetivos a cumplir y atacarlas para mejorar tanto el servicio y, en este caso en particular, la cobrabilidad. Queremos que al vecino también se le haga más fácil pagar las cosas”.
Estas acciones van en sintonía con lo que anunció el intendente Guillermo Montenegro en agosto, cuando planteó la necesidad de “mejorar el porcentaje de cuentas que pagan las tasas”, ya que “más de un 40% no lo hace”.
“Me parece que es muy importante determinar quiénes son los que están en condiciones de llevar adelante esa carga y quiénes no. Si no lo mejoramos, no podemos bajar los impuestos. No podemos generar mejores condiciones para que los privados creen más trabajo”, aseguró.
Para lograr esa recuperación, según Montenegro, la gestión local necesita “una gran inversión en infraestructura, sistemas y capacitaciones”.
Por eso anticipó que habrá una licitación con el objetivo de que un privado, “a su propio riesgo”, mejore el sistema tributario municipal “con recurso humano especializado y poniendo a disposición las herramientas informáticas que sean necesarias”.
E insistió en que la empresa que va a llevar adelante la tarea sólo recibirá contraprestación “si el municipio logra cobrarles a los deudores de siempre”. “No ponemos un peso”, graficó Montenegro.
Hasta el momento, más allá de los cambios recientes en la ARM, no se informaron más avances respecto a la mencionada licitación para mejorar la cobrabilidad.