Los dueños de los locales se reunieron con Sergio Berni y Guillermo Montenegro. Más policías y puesto de salud en Playa Grande, pedido de pase sanitario y fin de actividades en los boliches a las 6 fueron algunas de las cuestiones acordadas.
Obligación de pedir el pase sanitario, incremento de presencia policial, instalación permanente de un sector para atender emergencias médicas y ambulancias, interconexión de las cámaras de seguridad privadas con las del COM y cierre de los boliches a las 6 fueron algunas de las cuestiones abordadas hoy a la tarde en una reunión entre Sergio Berni, el ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, funcionarios locales del área y empresarios de la nocturnidad. También se trató la posibilidad de extender el horario para el ingreso a los boliches y para la venta de bebidas alcohólicas pero para que esto ocurra deberá modificarse una ley.
Berni se reunió con empresarios de la nocturnidad de Mar del Plata y de la costa atlántica para coordinar detalles del operativo de seguridad nocturno y cuestiones sanitarias aplicadas al sector, en el marco de una temporada que se perfila con muy buena asistencia turística.
“Abordamos temas relacionados con el operativo de seguridad en general y situaciones sanitarias, es la continuidad de las mesas de trabajo que venimos manteniendo con la secretaria de Seguridad local”, describió el empresario Federico Goransky.
En el encuentro, que se desarrolló en el NH Gran Hotel Provincial, la oportunidad también dijeron presente sus colegas Matías Iriarte y Ariel Gambini, Gustavo Greco, Franciso de Angeli, Luciano Chousal, Martin Gimenez y Pablo Marin, todos con emprendimientos en Playa Grande, las playas del sur y Villa Gesell. En tanto, Berni estuvo acompañado por el intendente local Guillermo Montenegro, el secretario de Seguridad de General Pueyrredon, Horacio García, e integrantes de la cartera Gustavo Jara y Martin Ferlauto, y el titular de Inspección General Marcelo Cardoso.
Alineados
Entre las cuestiones sanitarias abordadas, se estableció que en los locales “se pedirá el pase sanitario obligatoriamente” y también coordinarán “la instalación de puestos de vacunación nocturnas en los sectores de mayor afluencia, para que nadie se quede afuera”, detalló Goransky.
Además se decidió la instalación de “un puesto fijo para atención de contingencias médicas y de una ambulancia en forma permanente” y la presencia “constante” de personal policial y de otras fuerzas de seguridad. Así, en el playón central de Playa Grande se instalará una posta policial con personal de la comisaria 9°.
Si bien los establecimientos siguen respetando los protocolos sanitarios -como la toma de temperatura antes del ingreso- ésta temporada ya no tendrán que funcionar con burbujas ni aforos limitados.
“No hay más burbujas ni aforo, cada local podrá completar su aforo como en la pre pandemia, aunque respetando los protocolos”, señalaron representantes de La Normandina y calificaron a la reunión como “muy positiva”.
En pos de la tan mentada “colaboración entre lo público y lo privado”, se determinó que “todas las cámaras
estarán conectadas con el COM”.
En cuanto al horario de cierre de los boliches, se estableció que sea “a las 6 de la mañana y no a las 6.30 como temporadas pasadas, así a las 7 la ciudad ya está preparada para la actividad diurna”, señaló otro de los presentes.
Actualmente, las puertas de los boliches cierran a las 5.30 y se extendían una hora más durante la temporada.
El ministro se llevó dos pedidos de los empresarios: estirar el horario de ingreso a los boliches (hoy puede hacerse solo hasta las 2) y prorrogar el horario de venta de bebidas alcohólicas, que hoy es hasta una hora antes del cierre del establecimiento. Para que las solicitudes se hagan realidad se debe modificar la ley 14.050, que regula ambas cuestiones.