El sospechoso de haber matado a Franco Morales (24), capturado el martes luego de estar 8 meses prófugo, fue citado en Tribunales pero, por consejo de la defensa, rechazó ser indagado por la fiscal Andrea Gómez y permanecerá alojado en la Alcaidía Penitenciaria Nº 44 de Batán.
Matías “Zorrino” Suraniti (25) se negó a declarar este miércoles en Tribunales en el marco de la causa en la que se lo acusa de haber matado a Franco Morales (24) el 19 de abril pasado en el asentamiento conocido como “Villa Gascón”, y seguirá preso en la cárcel de Batán.
Suraniti fue citado por la fiscal Andrea Gómez en Tribunales, luego de que el martes fuera detenido en el barrio Alfar tras pasar 8 meses prófugo. Sin embargo, por consejo de su abogado defensor Mauricio Varela, rechazó ser indagado por la investigadora y luego de la diligencia se dispuso su traslado de regreso a la Alcaidía Penitenciaria Nº 44 de Batán, donde permanecerá alojado mientras continúa el proceso judicial en su contra.
Personal de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) local había detenido al acusado, el martes por la tarde mientras circulaba en una motocicleta por la calle Corbeta Uruguay al 4900 junto a una mujer. Para ese momento, los pesquisas llevaban siguiéndolo cinco días, luego de más de medio año de allanamientos y procedimientos fallidos para lograr su captura después de que la fiscal Gómez y la policía lo señalaran directamente como el autor del crimen de Morales, ocurrido el 19 de abril en el marco de un enfrentamiento.
El de Morales no es el primer crimen del que se lo acusa a Suraniti, quien se ganó su apodo de “Zorrino” en 2014, cuando la “moda” le exigía un corte de pelo particular: rapado prácticamente a cero en los costados y una cresta decolorada que podía ser rubia o plateada. Para ese año, uno después de haber cumplido la mayoría de edad, el sospechoso ya tenía causas por “amenazas calificadas reiteradas”, “abuso de armas” y “robos”, además de varios conflictos con la ley penal de cuando era menor.
En ese entonces, además, quedó envuelto en el homicidio de Brian Vanegas (24), quien disputaba el control territorial de la denominada “Villa Gascón”, y estuvo detenido en la cárcel de Batán, pero luego las causas se cayeron por falta de testigos -varios desistieron de declarar en Tribunales por temor a represalias- y recuperó su libertad.