Merceditas Elordi, premiada por su rol en "Lúcido", y el elenco de la obra analizan la actualidad de esta pieza que tiene la pluma ajustada de Rafael Spregelburd y que ya se despide de la temporada marplatense.
“Hago de una madre disfuncional que me permite darme todos los gustos como actriz”, dijo Merceditas Elordi en relación a su rol en “Lúcido”. Por su desempeño se quedó con el premio a la mejor actriz en los Estrella de Mar 2020. Escrita por el prestigioso dramaturgo Rafael Spregelburd, la obra está a punto de despedirse de Cuatro Elementos (Alberti 2746): se la podrá ver el martes 25 de febrero a las 22 y luego, iniciará su ciclo en la ciudad de Buenos Aires, de donde es el elenco.
“‘Lúcido’ tiene contrato para estrenar en Capital Federal el 19 de marzo, los jueves en el Teatro Método Kairos, durante tres meses”, contaron a LA CAPITAL.
Para Elordi, una actriz marplatense que vivió en esta ciudad hasta 2010 y luego se radicó en Capital, desarrollar la pieza en el verano local tiene el sabor a “sueño cumplido”.
“Cumplimos un sueño con el elenco, porque queríamos trabajar juntos actuando, a Sofía González y Patricio Paz los dirigí en La música del viento”, recordó Elordi sobre sus compañeros de elenco, a los que se suma Juan Pablo Carrasco, todos dirigidos por Sebastián Bauzá.
La actriz defendió la labor del teatro independiente, campo desde el que se gestó esta pieza y en la que viene trabajando desde que comenzó a actuar, “hace veinte años”, recordó emocionada, tras ser premiada con el Estrella de Mar.
“Nunca me tocó trabajar en el teatro comercial, el teatro independiente es cuna de grandes artistas, así que lo hago con mucho honor”, indicó y calificó a “Lúcido” como una pieza que no deja de tener reconocimientos en cuanto escenario se la monta.
“Acopió premios en todo el mundo, como obra, como dirección, se está haciendo en Génova, en Alemania y por primera vez se está haciendo en Mar del Plata”, expresó.
En charla con el elenco, los participantes contaron cómo se vincula “Lúcido” con la actualidad. “Bajo la forma de una comedia de intrigas, que navega entre los sueños y la realidad, Lúcido nos cuenta la cruda historia de una familia. Una madre y sus dos hijos se reencuentran luego de quince años para sacar a luz antiguos conflictos familiares”.
Y agregaron que “es una obra que está atravesada por múltiples emociones y alterna entre diferentes planos de la realidad, donde nada es lo que parece, transita por los bordes de la locura y la cordura. Es una historia que tiene que ver con la empatía, donde muchos sienten una profunda conexión con el sorprendente final”.
Por eso entendieron que “tiene una vigencia extraordinaria, porque incursiona de manera magistral en la mente humana”.
-¿Por qué elegir a Rafael Spregelburd?
Patricio Paz: -La obra llegó a mí luego de un mes de acudir a leer a la biblioteca de Argentores en busca de un material que me cautivara y me permitiera poder trabajar con el equipo de actores que conforma “Lúcido”, con quienes compartimos otras experiencias teatrales previas y queríamos mantener este equipo de gente valiosa. “Lúcido” apareció de manera mágica el último día antes de que cerrara la biblioteca por remodelaciones. Me enamoré al instante de esta historia delirante, potente, sensible y con un humor tan argentino que se burla de las desgracias. La forma tan azarosa de descubrirla, sumada a la profunda admiración que siento por Spregelburd por su singular dramaturgia, llena de diversas capas y desafíos para que el espectador teja sus conclusiones, fueron el indicador de que por fin había dado con la obra que tanto buscábamos.
-¿Qué aporta al espectáculo el hecho de que se haya quedado con un Estrella de Mar en el rubro mejor actriz?
Merceditas Elordi: -Entiendo que el espectáculo es uno y evoluciona y se fortalece en cada función, va madurando con el aporte de cada uno de nosotros. Somos un elenco que tiene una mirada muy ajustada sobre lo que vamos construyendo, estamos permanentemente profundizando y descubriendo la obra. Por eso, creo que el premio recibido no aporta al espectáculo en sí, sino que puede ser un facilitador y sobre todo contribuir a que los espectadores se interesen y se acerquen. Luego, está en nosotros no defraudarlos. Es nuestro mayor compromiso.