El pontífice donó una suma de dinero a través de la Papal Foundation, que será utilizada para la concreción de este refugio que busca no sólo contener a mujeres, niños y niñas víctimas de violencia familiar en la ciudad, sino transformarse en un "espacio de promoción humana".
MIRAMAR (Corresponsal). – Hace aproximadamente un año, el cura párroco de Miramar, Pablo Boldrini, tomó contacto con la Papal Foundation, organismo que preside el Papa Francisco para otorgar subsidios destinados a distintas obras de caridad en el mundo.
En su momento, el sacerdote local, le presentó el proyecto denominado “Casa de la Caridad” (ex Casa de Medio Camino) junto con un presupuesto para su realización.
Originalmente la obra tenía como objetivo poner en valor una propiedad, situada sobre la calle 60 entre 9 y 11 y que tenga las comodidades posibles para albergar a mujeres, niños y niñas víctimas de violencia de género u otros conflictos familiares para de esta manera brindar apoyo psicológico y legal.
De todas maneras, el alcance será mayor y eso lo hizo saber el propio Boldrini a LA CAPITAL. “Pretendemos que sea un centro de promoción humana, el proyecto tiene otros alcances, es mucho más ambicioso y va a cumplir con mayores necesidades para la comunidad local”.
Afortunadamente, Francisco consideró esta posibilidad y autorizó la suma solicitada para avanzar sobre la infraestructura. Tal es así que hace unos días, el nuncio apostólico de nuestro país le comunicó al Padre Pablo que la Fundación Papal ya había depositado en el Banco IOR de la cuenta del Obispado de Mar del Plata la cifra establecida.
Una vez cumplidas algunas gestiones administrativas que especifiquen el origen de dicho dinero, se podrá poner manos a la obra para tan ansiada edificación. Mientras tanto, el párroco de Miramar ya designó una comisión administradora y ejecutiva con personas comprometidas de la comunidad para la realización de todo lo concerniente a la planificación.
“El Papa miró desde Roma con misericordia nuestra comunidad y la necesidad de los pobres más próximos a nosotros. Esto nos invita y exige a responder de igual manera, con un servicio dedicado, entregado y misericordioso al Jesús que vive en los más pobres. El Papa, el Vicario de Cristo en la tierra, es el que nos envía, no con las manos vacías, a vivir lo más importante que es el mandato de la caridad. ¡Gracias, querido Papa Francisco, Ave María y Adelante!”, expresó con alegría Boldrini.