Hoy en el teatro Bristol, es la última función de "No seré feliz pero tengo marido". Linda Peretz comienza así su despedida popular "y una cita de amor con el público".
Este domingo se completa la primera etapa de una serie de funciones que Linda Peretz hará en Mar del Plata hasta Semana Santa. Se trata de su “caballito de batalla”, tal como ella misma denomina al unipersonal “No seré feliz pero tengo marido”. Hoy a las 20.30 Peretz subirá al escenario del Teatro Bristol (Santa Fe 1751) y las entradas -con un valor popular- se encuentran a la venta en la boletería del teatro y por PlateaNet.
“Hace 16 años que vengo haciendo esta obra y nunca perdí el entusiasmo en ella. Esta es una despedida pero también una cita de amor con el público”, afirmó la actriz quien anticipó que la augura un 2017 con nuevos proyectos.
“Estuve en Mar del Plata el año pasado para esta fecha y ansío reencontrarme con el público para divertirnos juntos. Hay mucha entrega de parte mía desde el escenario y seguramente eso la gente lo debe percibir”, reflexionó Linda sobre “la comedia que es muy reflexiva y los espectadores se involucran con la temática, tan universal y de todos los tiempos como es la del matrimonio”, agregó.
“No seré feliz pero tengo marido” ha sido vista por medio millón de espectadores y la cifra se acrecienta a diario. “La obra se divide en distintas escenas en las que se desarrollan subtemas del matrimonio como el hombre que tiene el amor hacia el fútbol, el control remoto y su auto; todo visto desde la mirada de la mujer y sin embargo son los hombres que vienen solos o con sus parejas los que siempre se sienten agradecidos por lo delicado que es el texto y la interpretación al momento de abordar el tema”.
Representada en varias partes del mundo, Linda Peretz analizó los diferentes públicos comentando que en términos generales es bien recibida por el público. “En Madrid ocurrió algo curioso, pues allí el hombre es muy machista y las mujeres son las reinas de la casa; entonces el hombre es un gran observador. Por su parte, en Barcelona son más parecidos a los argentinos y en México? a los españoles, pero siento que en todos lados el matrimonio se cortó siempre con la misma tijera”.
“Sin dudas esta obra es mi caballito de batalla y me da muchas satisfacciones, por eso siento pena en dejarla. Igualmente, luego de las funciones en Mar del Plata en abril estaré de viaje y en mayo comenzaré una gira por varias provincias”.