Su presidenta, Mónica Lence, manifestó preocupación por las demoras de las partidas presupuestarias que debe enviar la Provincia. “Las suelen mandar a principio de enero y todavía no están”, indicó y adelantó que esto puede provocar que algunos establecimientos no puedan empezar las clases.
Desde el Consejo Escolar de General Pueyrredon advirtieron que aún no cuentan con los fondos que deben recibir del gobierno bonaerense para realizar reparaciones y mantenimiento de establecimientos educativos de Mar del Plata que dependen de la Provincia, con el objetivo de que todos estén en condiciones para el inicio del ciclo lectivo 2024.
La presidenta del Consejo, Mónica Lence, destacó el trabajo en conjunto de parte de los consejeros escolares de todas las fuerzas políticas, quienes alcanzaron el consenso de “elegir muy bien las prioridades sobre en qué escuelas se va a trabajar primero que en otras”.
“A pesar de tener eso, estamos viendo como conflicto que no tenemos las partidas presupuestarias que se suelen mandar a principios de enero y todavía no están”, agregó Lence, de Juntos por el Cambio, en diálogo con LA CAPITAL.
“Ya los reclamamos y todavía no hay novedades”, continuó la presidenta del Consejo Escolar y remarcó que estos fondos son “indispensables porque te permiten acomodar las escuelas para el principio de clases”.
“Son fondos que tiene que mandar la Provincia y que los manda todos los años. Por medios no oficiales, lo que se rumorea, es que los van a mandar, pero no tenemos ninguna fecha ni certeza”, alertó.
En este marco, Lence admitió sentir “preocupación” y aseguró que ya la transmitió “donde tenía que hacerlo”. “Creo que los fondos van a llegar, pero el tema es cuándo, porque después hay que correr a contrarreloj. En marzo todos se van a rasgar las vestiduras, pero ahora es cuando hay que trabajar”, insistió.
La preocupación de Lence también radica en que “una vez que llegan las partidas hay procesos administrativos que llevan su tiempo y las clases empiezan en marzo”. “Cada día que se demora la llegada de las partidas para nosotros es un montón”, aseveró.
Mientras tanto, aseguró también que se trabaja en algunas escuelas con “el fondo de emergencia de la presidencia del Consejo”, pero aclaró que con estos se puede hacer muy poco si se tiene en cuenta la situación de infraestructura de las más de 300 escuelas de gestión provincial que hay en Mar del Plata.
En este sentido, Lence aseguró que las escuelas de la ciudad padecen “hace décadas un deterioro que es progresivo”. “Siempre falta plata para trabajar en la prevención y se trabaja en los problemas que van surgiendo”, indicó y consideró que “se necesita un plan que vaya más allá del gobierno de turno, un plan concreto de infraestructura en escuelas”.
Por otra parte, Lence señaló que “otra problemática grave” que debe enfrentar el Consejo Escolar es “la situación general” económica del país. “Los proveedores no tienen precios, se van los costos por la inflación, nadie se presenta en las licitaciones de obras chicas y estamos muy jugados con que no hay gasistas ni electricistas que se animen a cotizar porque la variable de la inflación te come lo que ya tenés y los presupuestos que te asignan”, analizó.
Respecto a la inflación, se destacó también que por el momento no se sabe cuál será el porcentaje de aumento que tendrán las partidas presupuestarias destinadas a General Pueyrredon para realizar las reparaciones que se suelen hacer en esta época del año.
Según pudo averiguar este medio, el año pasado para este fin, el Consejo Escolar local recibió unos 100 millones de pesos. “Calculamos que debería llegar un 200% más. Tendría que venir tres veces más de lo que vino el año pasado”, consideró Lence.
No obstante, la presidenta del Concejo manifestó con resignación que “la sábana va a ser corta” y alertó que lo que le preocupa es que “pase algo grave en una escuela”.
“Hay intervenciones que no podemos hacer porque no tenemos los fondos y eso es riesgoso. Las escuelas tienen que tener los recursos para trabajar en cosas que son graves como la electricidad y el gas. Si no nos ponemos a trabajar ya, realmente es peligroso”, concluyó.