Empresas de materiales para la construcción registran una creciente demanda. Marplatenses resguardan su capital a través del acopio, modalidad que congela precios por más de un año.
Ante la gran incertidumbre que generan la suba del dólar y la inflación, los marplatenses encuentran una posibilidad para resguardar sus ahorros en la realización de acopios de materiales para la construcción.
Existen diferentes maneras de ahorrar y resguardar el dinero. Mientras hay quienes invierten en criptomonedas, guardan dólares bajo el colchón, realizan un plazo fijo o se atreven a invertir en la bolsa, otros apuestan al ladrillo como refugio, un clásico que según los corralones, “le gana al dólar”.
El acopio consiste en adquirir insumos en el momento en que se dispone del dinero, sin la necesidad de retirarlos al efectuar la compra.
Es decir, los materiales son guardados hasta que el cliente los solicite para su construcción o los vaya retirando periódicamente. En algunas empresas, el acopio se extiende por más de un año, con precios congelados.
De esta manera, los compradores logran constituir una inversión alternativa de capital de amplio respaldo y sin riesgo.
La mayoría de las personas que emprenden la construcción o ampliación de su vivienda, o bien invierten en ampliar su local o empresa, acostumbran tener sus ahorros en dólares, y una manera de evitar que la obra se frustre por la inflación o los altibajos en la divisa extranjera, es acopiar materiales en los corralones más confiables de la ciudad.
IMEPHO es una de las empresas insignia de Mar del Plata con una historia de más de 65 años, que posee una planta de producción de hormigón de última tecnología con capacidad de producir 250 metros cúbicos por hora y un laboratorio de investigación único en la ciudad.
Todo emplazado junto al centro integral de logística que abastece, en simultáneo, a 10 camiones de carga, de los más de 35 de la flota de la empresa, con todo tipo de materiales de corralón.
José María Brandinelli, responsable de IMEPHO, aseguró en este sentido que el acopio de materiales en su empresa es “una verdadera caja de ahorro de la construcción”.
“El ladrillo ha sido históricamente un resguardo de valor que siempre le ha ganado al precio del dólar”, aseguró y señaló que en los últimos días, muchos de los clientes “incrementan sus acopios como reacción al contexto de incertidumbre”.
Planta de producción de hormigón de última tecnología de IMEPHO.
IMEPHO posee una amplia gama de productos de construcción fina con respaldo de amplia existencia en su stock. En todos los casos con total respaldo de entrega en el momento que el cliente lo disponga.
Al respecto, Brandinelli agregó que “la construcción ofrece una alternativa cuando se analiza la posibilidad de ahorro o refugio frente a una inflación que no da respiro”.
“La tendencia se mantuvo incluso en los últimos días, aún con la incertidumbre que se vio reflejada en la reciente suba del dólar, por lo que la compra de materiales volvió a ser una opción para preservar el valor de los pesos”, comentó.
Un ingrediente alternativo para realizar los acopios es que continúan vigentes los planes de financiación.
Ahora 12 y 18 son muy utilizados y continúan siendo una buena herramienta ya que al comprar en cuotas, los pagos mensuales se ven superados por la inflación mensual, lo que redunda también en un rendimiento más que importante de la inversión realizada en la compra de materiales.
Juan Manuel Landa es otra empresa tradicional del rubro en Mar del Plata, con más de 30 años de experiencia dedicada a la venta de materiales para la construcción.
El dueño y responsable de la marca, Juan Manuel Landa aseguró que a pesar de las variables económicas “hay buena cantidad de materiales disponibles” y no se vienen registrando faltantes de ningún tipo.
En cuanto a los precios, “los aumentos vienen acompañando a la inflación” y la mayoría de los productos se incrementan alrededor de un 5% cada mes, otra razón por la que el acopio conlleva una “gran ventaja”.
La firma se caracteriza por la atención directa de sus dueños, sumada a una moderna flota de camiones que asegura la entrega en tiempo y forma, lo que “garantiza el acopio en forma segura” y que las obras “no sufran contratiempos”.
Landa señaló que cada vez que hay alteraciones en la economía y sobre todo cuando sube el dólar como en las últimas semanas, “la gente se vuelca al acopio, compra un poco más de materiales y refugia su ahorro de esa manera”.
Una de las grandes ventajas de esa modalidad es el tiempo en el que los precios de los materiales de la construcción quedan congelados.
“Con el acopio aguantamos el precio durante un año sin problemas. Y si necesitan algo más, se lo renovamos por otros seis meses, es decir, hasta un año y medio”, explicó el dueño de la empresa que lleva su mismo nombre.
“Es un buen refugio y una buena opción que le conviene al que está construyendo y a nosotros nos permite asegurar el trabajo”, completó.