Pese a que "Teté" manifestó su intención de quedarse, la dirigencia entendió que su ciclo había terminado. Franco vuelve tras el grato recuerdo que dejó en su paso por la temporada 2013/2014 de la Primera B Nacional.
Por Víctor Molinero
@vhmolinero
Ni Hillary, ni Trump. El Supermartes se vivió ayer en Aldosivi, una jornada en la que pasó de todo. Tanto que en una mañana agitada, la dirigencia del club portuense se inclinó por echar a Fernando Quiroz y horas después arregló de palabra el regreso de Darío Franco, quien anoche era esperado en Mar del Plata, hoy por la mañana firmaría su contrato y en el turno vespertino dirigirá su primera práctica al frente de un plantel con el que debutará el lunes, cuando Aldosivi reciba desde las 19 a Defensa y Justicia por la novena fecha del torneo de Primera División.
En el medio hubo una visita de la barra para hacer un encendido reclamo a algunos jugadores (ver aparte).
Crónica de una salida anunciada
Fernando Quiroz es probablemente el técnico más querido en la historia de Aldosivi. Con él al frente, el equipo portuense logró gestas inolvidables. Como ascender a Primera División en un hecho inédito para el fútbol marplatense o darse el gusto de golear a Boca en La Bombonera, ganarle a River como visitante o vencer a Independiente y San Lorenzo en el José María Minella.
Con “Teté” Aldosivi clasificó a una liguilla y estuvo a un partido de conseguir meterse en la Copa Sudamericana.
Pero el presente del equipo portuense distaba de ese glorioso pasado reciente.
El flojísimo nivel del equipo en el arranque del campeonato había encendido las luces de alarma para Fernando Quiroz. Y ya había trascendido que algunos integrantes del plantel y parte de la dirigencia lo miraban de reojo.
Pero el paso adelante para ponerle fin al segundo ciclo de Quiroz en el Aldosivi lo dio el propio “Teté” el domingo, minutos después de la dolorosa derrota ante Godoy Cruz (1-3).
En diálogo con el colega Braulio García Camarena, quien viajó junto a Hernán Río para cubrir el partido en Mendoza para LU6, Quiroz admitió (palabras más, palabras menos), que ponía su renuncia a disposición y que lo que dicidiera el presidente José Moscuzza estaría bien.
En otras palabras, allanó el camino para apurar una decisión que la dirigencia probablemente había estudiado pero en la que no se animaba a avanzar quizás por el temor al costo político que supone echar al técnico más importante de la historia del club.
El regreso desde Cuyo se demoró por problemas con el vuelo de regreso y el lunes fue un día prácticamente perdido. Por la noche, sin embargo, la cúpula directiva se reunió y comenzó a definir la salida de “Teté”.
Desde entonces el hermetismo fue total. Resultó imposible contactarse con algún dirigente importante del club portuense durante la noche del lunes y todo el martes.
Y al mismo tiempo, en la cabeza de Quiroz, fue quedando atrás aquella idea de poner la renuncia a disposición e hizo público se deseo de seguir al frente del plantel.
La decisión ya estaba tomada de todas formas.
En la mañana del martes, el vicepresidente José Marcelo Moscuzza se reunió con Quiroz y le manifestó la intención dirigencial de dar por finalizado el vínculo de común acuerdo. Pero, según trascendió, “Teté” se negó a renunciar y llegó al Predio Deportivo con la intención de dirigir la práctica.
Fue entonces cuando intervino el presidente del club, José Américo Moscuzza, quien le comunicó a Quiroz que la decisión ya estaba tomada.
El propio entrenador lo aclaró en varios medios a lo largo de la mañana. “Me echaron, yo no renuncié”, aseguró dejando en claro que quería dirigir al equipo frente a Defensa y Justicia.
Por la tarde, el representante del técnico y la dirigencia se encontraron en una escribanía local para dar por finalizado el contrato.
Darío Franco, el elegido
Mientras tanto, antes de cumplirse ese formalismo, algunos dirigentes ya tenían en claro que Darío Franco era el elegido para reemplazar a Quiroz.
Durante la tarde se cerró el trato de palabra y Franco era esperado anoche en Mar del Plata. Según se informó extraoficialmente, hoy por la mañana firmará su contrato y en horas de la tarde dirigirá su primera práctica al frente del plantel.
El oriundo de Cruz Alta vuelve así al club al que ya dirigió durante 32 partidos en la temporada 2013/2014 de la Primera B Nacional, más otros dos por Copa Argentina.
Aquella temporada arrancó con Sebastián Pascual Rambert al frente del equipo (8 partidos), siguió con un interinato de Pablo Corti (2) y con el fugaz paso de “Mostaza” Merlo (apenas un entrenamiento). El equipo acumulaba seis empates y cuatro derrotas y todavía no había ganado.
Franco asumió en un partido como local ante Independiente Rivadavia, saldado con derrota (0-1). Y le siguieron luego otras dos goleadas en contra frente a Huracán en Parque Patricios (1-4) y Banfield en el Minella (0-3).
Llevó algunas semanas que los jugadores interpretaran el gusto futbolístico de Franco, un DT audaz, que toma riesgos y apuesta siempre a ejercer una presión alta para mirar el arco de enfrente como prioridad.
Cuando el técnico y los jugadores comenzaron a funcionar, Aldosivi tomó vuelo y obtuvo muy buenos resultados. El equipo mejoró notablemente. Al punto que en el segundo semestre Aldosivi ganó casi tantos puntos como los ascendidos Banfield, Defensa y Justicia e Independiente.
Con Franco al frente Aldosivi ganó 11 partidos, empató 12 y perdió 7 por la B Nacional y jugó otros dos por Copa Argentina (1 triunfo y 1 derrota).
La dirigencia intentó retenerlo pero Franco prefirió la oferta de Defensa y Justicia, con el que se daría el gran gusto de debutar como DT en Primera División, ya que los de Florencio Varela ascendieron ese año a la máxima categoría.
Franco, de 47 años, debutó como entrenador en Monarcas de México (2006), y luego dirigió en los también mexicanos Tecos (06/07) y Atlas (08/09). Más tarde pasó por San Martín de San Juan (10/11);Instituto (11/12, donde hizo debutar entre otros a un juvenil Paulo Dybala); Universidad de Chile (2013), Aldosivi (13/14), Defensa y Justicia (14/5) y Colón de Santa Fe (15/16).
Como futbolista tuvo una destacada trayectoria. Debutó en Newell?s, jugó en la Selección Argentina, Zaragoza de España, Atlas y Morelia de México.
En este nueva etapa en Aldosivi estará acompañado por su hermano Hernán (ex jugador de Newell’s e Independiente entre otros), Alberto Morales y por el preparador físico Pablo Sala.
Franco, dueño de un carácter frontal y visceral cuando la pelota comienza a rodar (en la práctica o por los puntos), intentará recomponer a un plantel golpeado. Y deberá buscar dentro del grupo jugadores a quiénes interpreten mejor su idea impregnada por la intensidad para presionar bien arriba que le permita tener un trayecto más corto de las jugadas de ataque.