Se trata del sospechoso de haber asesinado a Franco Morales, el 19 de abril en el asentamiento conocido como "Villa Gascón". Lo detuvieron cuando circulaba en una motocicleta junto a una mujer por el barrio Alfar.
Matías “Zorrino” Suraniti (25), quien estaba prófugo desde abril pasado por el crimen de Franco Morales (24), fue detenido este martes a la tarde cuando circulaba en una motocicleta junto a una mujer por el barrio Alfar.
Al principal sospechoso de ser el autor del homicidio ocurrido hace ocho meses en el asentamiento conocido como “Villa Gascón” lo atrapó personal policial de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) local cerca de las 16 de este martes en la calle Corbeta Uruguay al 4900. En ese momento, Suraniti se encontraba a bordo de un ciclomotor en compañía de una joven, que no fue aprehendida.
Según pudo saber LA CAPITAL tras consultar fuentes del caso, Suraniti se hallaba prófugo desde el 19 de abril, cuando la fiscal Andrea Gómez y la policía lo sindicaron como el autor del homicidio de Morales en el marco de un enfrentamiento. En ese entonces, se ordenó su detención pero los uniformados no lograron atraparlo en ninguno de los allanamientos que se realizaron con esos fines. Por eso, se lo consideró prófugo y se pidió su captura.
Finalmente, el personal de la DDI lo identificó en el barrio Alfar y ahora deberá declarar en Tribunales como imputado ante la Justicia.
Cabe destacar que el de Morales no es el primer crimen del que se lo acusa a Suraniti, quien se ganó su apodo de “Zorrino” en 2014, cuando la “moda” le exigía un corte de pelo particular: rapado prácticamente a cero en los costados y una cresta decolorada que podía ser rubia o plateada. Para ese año, uno después de haber cumplido la mayoría de edad, el sospechoso ya tenía causas por “amenazas calificadas reiteradas”, “abuso de armas” y “robos”. Y fue entonces que quedó envuelto en el homicidio de Brian Vanegas (24), quien disputaba el control territorial de la denominada “Villa Gascón”.
Ese crimen ocurrió el 16 de noviembre y se cree que junto al “Zorrino” actuó Brian Juárez (19), quien a su vez fue asesinado de varios disparos un mes después en el barrio Aeroparque. La muerte de Vanegas se produjo en horas de la madrugada, tras bajar de un automóvil marca Volkswagen Bora en la villa “La Palangana”.
Entonces se le aproximaron al menos dos individuos y lo atacaron. Vanegas recibió un disparo en la cabeza, otro en la espalda y una puñalada en una pierna.
Peligroso
Suraniti y Juárez fueron señalados como autores del crimen de Vanegas. Pero además, se los acusa de haber cometido otro violento ataque a tan solo 10 días de ese homicidio, que los llevó a hacerse del control total de esa zona -y los negocios de venta de drogas que eso significa- y haber baleado en la cabeza a Cristian Gallardo (24), en 186 y Gascón. En este hecho, también fueron heridos los miembros de un matrimonio, testigos de la agresión. Los mismos atacantes dispararon contra ellos antes de escapar.
Matías “Zorrino” Suraniti.
El 9 de enero de 2015, un hombre de la familia Morales denunció al peligroso Suraniti y éste se enteró. La respuesta, según consta en las investigaciones, fue inmediata: el hombre fue herido de bala en una pierna. En marzo de 2015, fue detenido mientras caminaba por Gascón y 184 y lo trasladaron a la Alcaidía Penitenciaria Nº 44 de Batán.
Con el paso del tiempo, algunas de sus causas se cayeron por falta de pruebas y, principalmente, porque los testigos no se animaban a prestar declaración o faltaban en las audiencias para ratificar los dichos.
Consultadas por este medio, fuentes extraoficiales informaron que justamente en la cárcel de Batán Suraniti coincidió con Franco Morales, el joven al que luego, según la investigación, acabó por asesinar el 19 de abril de 2020 en la “Villa Gascón”.
Hay quienes sospechan que los problemas nacieron en los pabellones de la Unidad Penal de Batán y luego se trasladaron a las calles de la Villa Gascón. Otra de las hipótesis del hecho es que se trató de una discusión por problemas de droga, tanto de consumo como de venta. Lo cierto es que Morales fue asesinado y la detención de Suraniti, ocho meses después, servirá para que se empiecen a aclarar todas esas cuestiones.