Tiene 41 años y había sido detenida el sábado por el ataque a Walter Lizzarraga (42). Por su parte, el sospechoso de ser su cómplice se presentó en la DDI y quedó aprehendido, a disposición de la Justicia.
La mujer de 41 años que el pasado sábado fue detenida y acusada de haber baleado a un hombre que era su pareja en el barrio Kennedy, se negó a declarar ayer ante la Justicia y seguirá alojada en el Destacamento Femenino, mientras que su hijo, sindicado como cómplice, se entregó en la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI).
En tanto, Walter Lizzarraga (42) permanece internado en el Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA), como consecuencia de los dos disparos que recibió en el abdomen y en uno de sus tobillos. Según trascendió de fuentes extraoficiales, su cuadro de salud es grave y, si bien está lúcido, presentaría lesiones que podrían afectar su motricidad en el futuro.
El hecho que investiga Castro se produjo el pasado viernes, cuando Lizzarraga se dirigió a la casa de su ex pareja porque lo habían convocado para acordar una cuestiones por la tenencia de un automóvil. Al llegar a la vivienda de México al 3600, el hombre fue atacado a tiros y más tarde quedó internado en el hospital local.
Por su parte, la mujer y su hijo comenzaron a ser investigados y, conforme se supo, el móvil del ataque estaría vinculado a celos por una relación sentimental nueva de la víctima con otra persona, allegada a la familia. En ese marco, el fiscal Castro ordenó la detención de la acusada -que tiene antecedentes penales por el delito de “lesiones”-, la cual se consumó el pasado sábado.
En tanto, personal de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) local trabajó para dar con el paradero del hijo de la mujer, que fue declarado prófugo. Al verse cercado por los policías, el joven de 23 años se entregó en la dependencia de la mencionada fuerza y quedó a disposición de la Justicia, por lo que en las próximas horas será citado a declarar en Tribunales.