El teniente primero Octavio Escobar y la sargento Griselda Fredes frenaron su patrullero ante el llamado desesperado de un padre que veía que su hijo tenía dificultades para oxigenarse. A través de ténicas de RCP lograron reanimar al pequeño, que hoy se encuentra con su familia
La historia fue así: Los padres se asustaron cuando advirtieron que su bebé respiraba con dificultad después de tomar un medicamento que le habían recetado en un control médico. Al no poseer automóvil llamaron un remís que nunca llegó y frente a ese momento de desesperación salieron a la calle. Tuvieron suerte: se cruzaron con buenos policías en un patrullero.
El teniente primero Octavio Escobar y la sargento Griselda Fredes frenaron el móvil policial del Comando Patrullas Norte de Mar del Plata el miércoles 5 de octubre por la noche al ver a Matías agitar sus brazos y chiflar en una búsqueda desesperada de ayuda.
El joven, según contó a LA CAPITAL, les gritó a los policías que su bebé “no respiraba” y éstos le indicaron que se subiera junto a su mujer para poder ser trasladados hacia el Hospital Materno Infantil. Esteban, de sólo 8 días, se había ahogado después de tomar un medicamento que le habían recetado horas antes en el mismo nosocomio en un control médico.
Dentro del patrullero, el bebé iba en brazos de su madre, Fabiana, quien no le quitaba los ojos de encima. “Fueron minutos interminables en donde pusimos todos nuestros conocimientos aprendidos. Mi condición como chofer era llegar bien y lo más rápido al Materno y el de mi compañera fue contener la situación de desesperación dentro del móvil”, indicó Escobar.
En Colón y Jara, la mujer quedó en estado de shock y al ser consultada por el resto de las personas dentro del automóvil, comentó “dejó de respirar”, refiriéndose a su hijo.
Inmediatamente, Griselda tomó al pequeño y comenzó con el trabajo de RCP durante ocho minutos, “que parecieron una eternidad”, según Matías. El accionar de la sargento permitió que Esteban llegue al Hospital con signos vitales propicios.
Los jóvenes padres agradecieron “tanto a Griselda, que realizó el RCP, como a Octavio que manejó en esa noche de lluvia con un patrullero que no frenaba bien en el asfalto mojado”.
“Hoy te puedo decir que Esteban está vivo gracias a mi compañera. En casi 23 años de carrera he visto miles de situaciones que sólo en este trabajo se ven, pero este fue el más hermoso que me ha tocado vivir“, aseguró Octavio.
Esteban permaneció durante 6 días internado en neonatología en terapia intensiva. Sin embargo, actualmente, se encuentra en su casa junto a su familia con buen estado de salud.