La Princesa de Gales no se muestra en público desde diciembre del 2023.
Kate Middleton publicó una foto en su cuenta de Instagram en donde se la podía ver sonriente junto a sus tres hijos en la que sería su celebración por el Día de la Madre en el Reino Unido, que se celebró el domingo 10 de marzo. Sin embargo, muchos usuarios se dieron cuenta que la fotografía había sido retocada y la Princesa de Gales salió a disculparse.
“Como muchos fotógrafos aficionados, de vez en cuando experimento con la edición. Quería expresar mis disculpas por cualquier confusión que haya causado la fotografía familiar que compartimos ayer. Espero que todos los que celebran hayan tenido un muy feliz Día de la Madre”, escribió Middleton, sumando más confusión sobre su estado de salud.
La Princesa de Gales se sometió a una cirugía abdominal en el mes de enero y aún no se encuentra recuperada. Está aislada y enfocada en mejorar para poder retomar sus actividades.
Si bien no se dieron muchos detalles sobre la intervención, la familia real británica confirmó que Middleton estuvo internada durante dos semanas, tras el procedimiento. Luego continuó con los cuidados en la finca de Sandringham, rodeada de naturaleza y de sus seres queridos, como el rey Carlos, que fue diagnosticado de cáncer recientemente.
La periodista Concha Vallejo, especializada en la casa real británica, reveló que “hay cosas que no las podemos contar todavía. Evoluciona, pero no todo lo favorable que la casa real británica querría que fuera”.
“Ha habido un movimiento de la casa real inglesa que no se entiende. Por un lado, filtran que Kate ha contratado a un secretario particular, para dar a entender que está en casa haciendo cosas, pero, por otro lado, no vemos una imagen. Hasta que no la veamos, las especulaciones no van a parar”, aportó el periodista, Aurelio Manzano, que también se dedica a las noticias sobre la Realeza.
La recuperación demora porque “la operación fue grave en sí misma. Después, hubo complicaciones más graves todavía. Y los médicos tuvieron que tomar una decisión rapidísima, que fue inducirla al coma. Y eso fue así. La princesa no entró en un coma, fue inducida”.
Lo cierto es que como la Princesa de Gales no aparece en público, las teorías conspirativas se multiplican y no paran de circular en redes sociales, mientras la realeza británica continúa sin dar demasiadas explicaciones.
“¿Está muerta?, ¿Tuvo un ACV?, ¿Le hicieron una colostomía?, ¿Está con depresión?, ¿Está en coma?, ¿Sufrió violencia doméstica?”, ¿Sufrió un breakdown mental porque los rumores en Inglaterra dicen que William está esperando un hijo con su amiga Rose, la marquesa de Cholmondeley?”, son algunas de las preguntas.
En septiembre de 2023, aparecieron fotos de Kate con los dedos rotos y dijeron que fue un accidente doméstico, aunque la prensa inglesa no descartó posibles peleas con William, que incluían gritos y posibles golpes.
La última vez que se la vio fue en Navidad. Dos días antes de fin de año, una ambulancia con custodia policial la trasladó al sanatorio y no se supo demasiado sobre su estado de salud hasta después de 20 días, cuando la Corona reveló que fue sometida a una cirugía abdominal, que le demandaba dos semanas de recuperación.
No la visitaron ni sus padres, ni su hermana, ni sus hijos, solo su marido. Entonces comunicaron que su recuperación le llevaría un mes y que se quedaría en una de las viviendas de la realeza para aparecer nuevamente en público en el mes de abril.
Pero la foto trucada en el Día de la Madre no hizo más que seguir sembrando dudas sobre su paradero y sobre su estado de salud, que hasta el día de hoy son una incógnita.