En el marco de una causa que está celosamente protegida por los investigadores, dos hombres de 21 y 43 años fueron detenidos por la muerte de una menor de 16 años. Se investiga si hubo ingesta de drogas y relaciones sexuales.
Una menor de 16 años murió el último fin de semana como consecuencia de un posible cuadro de sobredosis pero la autopsia reveló, además, que tenía signos de violencia sexual.
Por el hecho hay dos personas aprehendidas, un joven de 21 años y otro de 43, y la causa está siendo investigada por la fiscal María Isabel Sánchez. De acuerdo a fuentes consultadas por LA CAPITAL, ambos individuos habían sido demorados inicialmente bajo el cargo de “abandono de persona seguido de muerte”. Sin embargo, con las conclusiones de la autopsia se cambió por “abuso sexual seguido de muerte y homicidio criminis causa”.
Si bien faltan los resultados de los peritajes toxicológicos, la presunción es una falla letal a raíz del consumo excesivo de alguna droga. Por ello ahora la principal tarea a esclarecer es si la menor fue sometida a relaciones sexuales en un estado de extrema vulnerabilidad psicomotriz y eso provocó las lesiones advertidas.
Otro de los puntos a resolver por los investigadores es el marco en el que se desvaneció la joven. Algunos indicios aseguran que se encontraba junto a al menos dos personas.
Los hechos sucedieron el sábado por la tarde cuando la joven, cuya identidad será mantenida en reserva en tanto no se descarte que la muerte fue en el fuero privado, ingresó al centro de salud de Playa Serena. La menor presentaba un paro cardiorrespiratorio y pese a los esfuerzos del personal de la sala, no puedo ser reanimada.
En el lugar se encontraba de guardia el subsecretario de salud municipal, Pablo De La Colina, debido a que el médico de dicho centro barrial de salud había tenido un problema personal. “Yo mismo realicé las tareas de reanimación, pero la chiquita ya había entrado fallecida”, dijo De La Colina.
La sala de salud de Playa Serena se encuentra ubicada a pocos metros de la comisaría por lo que, tras constarse el fallecimiento de la adolescente, el propio De La Colina dio aviso a las autoridades policiales.
“Salvo una lesión leve en un dedo, no advertí otras señales de violencia”, dijo De La Colina en diálogo con LA CAPITAL.
La policía le tomó declaración a un amigo de la menor fallecida y quien se había encargado de llevarla hasta la sala de salud. La adolescente había sido trasladada en una camioneta por una persona mayor de edad, aunque de esta última no se supo más en ese momento.
Averiguaciones posteriores permitieron establecer la identidad y paradero de ese hombre y la fiscal Sánchez decidió localizarlo y aprehenderlo.
El expediente está en su etapa inicial y es imposible aventurar una hipótesis de lo sucedido. En principio, el joven declaró que estaban juntos y que de un momento a otro la menor se desmayó, lo que hizo que pidiera ayuda para trasladarla.
En cuanto a los vestigios de actividad sexual violenta, los peritos deberán determinar si fue facilitada por algún tipo de disminución en la lucidez a causa de la ingesta de drogas.