Un nuevo y estremecedor caso policial sacude a Mar del Plata. Una bebé de 11 años murió el lunes en el Hospital Materno Infantil por gravísimas lesiones producidas por una agresión sexual.
Una bebé de 11 meses falleció el lunes pasado en el Hospital Materno Infantil por malos tratos, pero la autopsia reveló que había sufrido una agresión sexual y por estas horas se investiga las responsabilidad de los padres, a quienes en el año 2013 se le había muerto otra niña.
Este nuevo y estremecedor episodio está radicado en la fiscalía de María Isabel Sánchez y oculta un trasfondo macabro, de drogas y maltrato infantil.
Por el momento no hay personas detenidas, aunque se supone que en las próximas horas el expediente podría sumar novedades al respecto.
En el año 2013, tras la muerte de la bebé de 5 meses, la Justicia decidió quitarle la tenencia de los menores al matrimonio, aún cuando no se pudo establecer con certeza la causa del fallecimiento. Algunos de los niños fueron dados en adopción, lo que refleja la gravedad de la situación.
Hace casi un año nació una nueva hija de la pareja, llamada Yazmín Milagros, quien resultó ser la bebé fallecida el pasado lunes.
El caso se inició durante el fin de semana, cuando la menor fue ingresada en el Hospital Materno Infantil con un cuadro clínico complejo.
Después de diferentes intentos por mejorar su condición, la salud de la bebé fue empeorando hasta que el día lunes se produjo su fallecimiento.
Las autoridades del hospital, conocedores de la historia familiar y pese a que no había en un principio señales de maltrato, realizó la denuncia policial correspondiente.
Luego todo fue cuestión de avanzar por los carriles propios del protocolo: la policía notificó a la fiscalía de María Isabel Sánchez, cuyo turno había terminado el domingo. Sin embargo, debido a que el ingreso de la menor fue el sábado, se tomó esa fecha como inicio de los hechos a investigar y no de la muerte.
Esta situación confusa hizo que la fiscalía 8 pasara la causa a la fiscalía 1, de Fernando Castro, que inició su turno el lunes. Fue precisamente Castro quien solicitó algunos trámites de urgencia, como la operación de autopsia, pero con la idea ya clara de devolver la causa a la fiscal Sánchez.
Finalmente se produjo la devolución del expediente, que volvió a la fiscalía que atraviesa por unos días de gran intensidad de trabajo porque investiga también el caso de Lucía Pérez.
Una historia turbia
La historia de los padres de Yazmín Milagros es, cuanto menos, turbia. En agosto de 2013 una hija de 5 meses murió en el Hospital Materno Infantil. Se llamaba Candela Milagros y falleció por causas controversiales. Un informe médico aseguró preliminarmente que la bebé tenía cocaína en la sangre pero la autopsia y otras conclusiones forenses no pudieron confirmarlo.
De todos modos, a raíz de la muerte de la niña y de otras circunstancias, los tribunales de Familia de Mar del Plata decidieron la quita de la tenencia de los demás hijos. Entonces los padres iniciaron una campaña por los medios, respaldados por la psicóloga Patricia Gordon de la ONG EnRed, para revertir esa decisión judicial.
La Justicia no aceptó los argumentos del tipo “es un caso de apropiación de chicos” y tampoco comprendió la certeza brindada por EnRed sobre la madre. “No presenta síndrome alguno y está apta para la maternidad”, decía por los medios.
Lo del síndrome surgió a raíz de un informe del Materno Infantil, el 15 de agosto del 2013, días antes de la muerte de Candela. En ese escrito los médicos refieren datos sobre el egreso de la menor -volvería pocas jornadas más tarde, ya para morir- y se menciona que “los relatos de la madre son confusos y disímiles. Diariamente se realiza seguimiento desde Servicio Social y Salud Mental debido a alto riesgo de Síndrome de Munchausen detectado en internaciones anteriores de sus otros hijos”.
Este síndrome es una enfermedad mental y una forma de maltrato infantil. El cuidador del niño, con frecuencia la madre, inventa síntomas falsos o provoca síntomas reales para que parezca que el niño está enfermo.
Sin embargo, la profesional Gordon aseguró que la mujer estaba en condiciones e insistió con la idea de su aptitud para la maternidad.
Tras aquellos meses de reclamo nació la niña Yazmín Milagros. La historia se repitió: internaciones y muerte. Esta vez, la autopsia reveló algo peor.
LA CAPITAL pudo saber que la mujer en la actualidad se encuentra embarazada.