El local de "Pepe" Suárez fue un ícono de la gastronomía marplatense. Cientos de famosos frecuentaron el lugar. La situación económica lo llevó al dueño a tomar la decisión de bajar la persiana.
Diego Maradona. Alberto Olmedo. Susana Giménez. Marcelo Tinelli. Jorge Porcel. Artistas, futbolistas y periodistas. Cientos de famosos de la Argentina pasaron por el lugar. Lo atestiguan las fotos que baja con tristeza José Francisco Suárez, un asturiano que desembarcó en Mar del Plata y marcó un hito en la gastronomía en las últimas décadas.
Después de casi 40 años, llega a su fin el restorán Amigos, ubicado en Garay 2280. Estuvo abierto por última vez el domingo a la noche. La situación económica llevó a Suárez a tomar la decisión que menos quería: la de bajar la persiana. “No da para más. Es imposible. Todo es caro. Si se aumenta más el precio del cubierto, la gente no entra”, le dijo a LA CAPITAL.
La caída de la actividad en los últimos tiempos y la significativa suba en servicios e impuestos, forman un cóctel difícil de sobrellevar para los empresarios gastronómicos.
“Desde diciembre veníamos diciendo que si la situación no mejoraba íbamos a vender el fondo de comercio y en eso estamos”, reveló y agregó que pese a que iba gente “ya no dan los números”. “Los impuestos son tremendos”, afirmó.
La historia de Amigos, de la mano de Pepe Suárez, se empezó a escribir en el Puerto. Allí tuvo su primer local y se abrió camino dentro de la oferta gastronómica de la ciudad.
Amigos es un clásico marplatense y un punto de reunión en el que coincidían personalidades de diversos ámbitos. Con impronta futbolera, era común ver a jugadores y dirigentes cenar en el local. También era un lugar frecuentado por los elencos de teatro luego de las funciones.
“Fotos, debo tener más de 600”, contó sin ocultar la nostalgia Pepe y compartió una anécdota con Diego Maradona. “Me debe una paellera”, reveló. “En una oportunidad, estuvo en Punta Mogotes por una actividad y después se quedó unos días descansando. El último día les hice una paella, eran como 20. Y después de comer se la llevó. Es un honor para mí”, relató.
El de hoy fue uno de los días más difíciles para Pepe Suárez. Por eso prefirió estar sólo. Después del mediodía se encerró en el restorán y empezó a desarmar todo. “No quise que venga nadie. Saqué todo yo. Esto está todo armado por mí. Quería que me dejen sólo en este momento”.
Con la decisión del cierre tomada, el futuro de Pepe Suárez es una incógnita. Sin embargo, admite que tiene un certeza:”Seguiré con la gastronomía, quizás en un local más chico o donde sea. Llevo casi 40 años y tengo para 20 más”, cuenta.
El cartel del cierre está pegado en la puerta de entrada al restorán que en los últimos tiempos tenía 6 empleados pero en temporada fueron 16. “Vine a las 14 y no para de sonar el teléfono para preguntar que había pasado. Estoy muy agradecido. La esperanza que tengo es que yo no le voy a aflojar, voy a seguir con la gastronomía”, aseguró.
Suárez fue árbitro de fútbol y dirigente de Aldosivi. Llegó a Mar del Plata en 1971 y empezó a construir su historia que también fue la de Amigos. “La principal satisfacción que me llevo es el reconocimiento de la gente. Yo camino mucho y a donde voy, me saludan con una sonrisa”, resaltó orgulloso.