Lo informó la Asociación Bancaria de Mar del Plata. La entidad advirtió que esta práctica es para lograr "desvincular" a un trabajador y así "evitar el accionar gremial".
La Asociación Bancaria de Mar del Plata denunció en las últimas horas que bancos privados presionan a empleados para aceptar el retiro voluntario, con una serie de nuevas prácticas que tienen como objetivo central desvincular a trabajadores y así “evitar la acción gremial”.
“Desde hace varios años, la Bancaria viene denunciando una práctica que lamentablemente continúa vigente y que comienza a generalizarse: algún funcionario toma la decisión de desvincular a una compañera o compañero y, para evitar el accionar gremial, se lo convence de llegar a un acuerdo para presentar su desvinculación como un retiro voluntario”, explicó al respecto el secretario general del sindicato, Eduardo Zingarelli.
El gremialista detalló que diversas entidades bancarias privadas “hace tiempo utilizan esta vieja estrategia”. Esto va en sintonía con lo que viene sucediendo en otras dependencias de la administración pública nacional, como la agencia Télam y Trenes Argentinos, así como en firmas privadas de gran envergadura -como las automotrices- , donde se han impulsado varios retiros voluntarios.
El gremio advirtió que, ante una negativa, diversas entidades bancarias utilizan la “presión, el destrato y el desgaste” para “quebrar la voluntad del trabajador” y así conseguir la propuesta ofrecida originalmente.
En este esquema, los empleadores apelan también a “traslados y no asignación de tareas” para los trabajadores, “siempre con el mismo objetivo de evitar el accionar gremial, presentando la desvinculación como un acuerdo de partes”.
Otra variante -apuntó Zingarelli- es la “desvinculación gastronómica”. La misma consiste en “presionar trabajadores y trabajadoras para que acepten un retiro voluntario”, pero con la novedad de que estas prácticas se ejercen en un local gastronómico.
“Puntualmente el acuerdo les es ofrecido en un café, donde funcionarios de la entidad ofrecen el acuerdo voluntario de desvinculación”, detalló el gremialista.
“Allí, además, se encargan de dejarle en claro (al empleado) que se trata de ‘una decisión tomada’ y que de no aceptar ese ‘retiro voluntario’ (o, mejor dicho, involuntario porque no nos cansaremos de decirlo: de voluntario no tiene nada) se deberá atener a las consecuencias, en una velada, aunque muy clara, amenaza”, comentó Zingarelli.
Y añadió: “Sirve la presente como una forma de poner en conocimiento de la opinión pública que estas prácticas siguen siendo utilizadas por los bancos”.
En la misma línea, comunicó que la denuncia tiene por objeto servir como forma de “alertar” a los bancarios de Mar del Plata y la zona para que se sepa que estas prácticas deben ser “denunciadas” ante los delegados de cada entidad o a la Asociación Bancaria misma.
“Nadie puede obligarnos a firmar algo con lo que no estemos de acuerdo”, sentenció el titular del sindicato.