Óscar Valerio Recio fue captado por las cámaras de seguridad en una emblemática librería de Buenos Aires.
El ministro de Asuntos Exteriores de México, Marcelo Ebrard, ordenó al embajador mexicano en Argentina, Óscar Valero Recio Becerra, regresar al país azteca tras haber sido filmado y retenido acusado de robar un libro en la emblemática librería El Ateneo de Buenos Aires.
“He solicitado al Comité de Ética que analice el caso del embajador en Argentina acusado de robar libros en famosa librería”, manifestó anoche el canciller mexicano en su cuenta de Twitter.
“Por lo pronto he ordenado que regrese a casa. De comprobarse que el vídeo es veraz será separado del cargo inmediatamente. Cero tolerancia a la deshonestidad”, añadió.
Ayer trascendió que Valero, académico, embajador de carrera y profesor de una de las universidades más importantes de México, fue filmado por las cámaras de seguridad de la librería, supuestamente sustrayendo una biografía del polifacético historiador italiano Giacomo Casanova (1725-1798).
En las imágenes difundidas por los medios, se puede ver a Valerio, de 76 años, tomando el libro, cuyo valor es de 598 pesos argentinos (unos 9 dólares), y escondiéndolo entre las hojas de un periódico.
El relato policial señala que ese día, poco antes de las 14, se recibió una llamada en la comisaría en la que se alertaba que se había retenido a un hombre en la librería, acusado de robar.
Se envió así a personal policial, que constató que el presunto autor del delito era Valerio Recio. Tras recabar su información personal, lo dejaron irse del lugar.
En el vídeo tomado por las cámaras de seguridad del establecimiento, que fue difundido por medios locales, se ve cómo el septuagenario diplomático -que fue ratificado como embajador en Argentina el pasado abril- llega a la librería y toma un libro de una estantería, para después ocultarlo entre las páginas de un diario.
Las imágenes muestran también a Valerio Recio salir del lugar con una bolsa de El Ateneo.
Al cruzar la puerta y sonar el dispositivo antirrobo, el guardia de seguridad va a su encuentro y juntos vuelven al comercio, donde se ve al embajador mostrar lo que lleva en la bolsa -el ejemplar y objetos que supuestamente había pagado en la caja- y el ticket de la compra, en el que según se conoció que no figuraba la biografía del italiano.