"Jamás hablé con Mandolesi ni le di orden o sugerencia alguna", afirmó el ex ministro de Planificación Federal. Se siente víctima de una persecución.
El diputado nacional y ex ministro de Planificación Federal del kirchnerismo, Julio De Vido, rechazó “haber acordado ‘pago’ alguno con Odebrecht” ante las dudas generadas por declaraciones de arrepentidos brasileños ante la justicia de ese país respecto de supuestas coimas abonadas en Argentina.
“Jamás hablé con (el ex director de Nación Fideicomisos, Roberto) Mandolesi ni le di orden o sugerencia alguna.
Tampoco di al respecto directiva alguna a mis funcionarios más cercanos”, acotó De Vido desde su cuenta en Twitter.
El ex ministro se manifestó así ante un reportaje del diario La Nación en base a documentos secretos de la investigación internacional Lava Jato que advirtió sobre una supuesta coima de 25 millones de dólares y prácticas no convencionales entre Odebrecht y funcionarios del kirchnerismo para obras de gas.
Ante ello, De Vido dijo que rechazaba “en forma categórica haber acordado ‘pago’ alguno con Odebrecht”.
En ese marco, también apuntó que “el supuesto arrepentido admite que nunca habló de ‘coimas’ en mi presencia”.
“Qué intereses debo haber tocado para sufrir tamaña persecución?”, se preguntó De Vido al cuestionar las investigaciones que lo vinculan con el caso Odebrecht y en las que involucró al gobierno.
Al respecto, señaló que “al comprobarse que las listas que obtendría el ministro de Justicia (Germán Garavano) en Estados Unidos eran mentira, recurren a inventos infames”.
De Vido consideró que se trataba de una supuesta “nueva embestida brutal política y mediática sin precedentes del gobierno” y señaló que “a diferencia de (lo ocurrido con la causa de Gustavo) Arribas, acá faltan transferencia, números de cuenta y un primo con una empresa socia de Odebrecht”.
“¿No será que lo de (Norberto) Meirelles fue un mensaje y coimeador y coimeado son la misma persona?”, apuntó De Vido en alusión al principal testigo que destapó las irregularidades de la compañía ante la justicia brasileña.
De Vido acotó que entre tanto “el gobierno negocia salida de Odebrecht del soterramiento, en lugar de rescindir el contrato, para que se lo queden sus familiares”.