Tras la visita presidencial, afirmó que Lula “está buscando financiar a exportadores".
El embajador argentino en Brasil y precandidato a presidente por el Frente de Todos (FDT), Daniel Scioli, dijo hoy que Alberto Fernández “no fue a pedir plata a Brasil” en su viaje de esta semana y consideró que el jefe de Estado brasileño, Luiz Inacio ‘Lula’ de Silva, está “buscando financiar a sus exportadores”, al realizar un balance del encuentro entre ambos mandatarios el pasado lunes en Brasilia.
En declaraciones a Radio Perfil, Scioli se mostró molesto con los “disparates” que se dijeron sobre la reunión de 8 horas en la residencia presidencial brasileña de La Alvorada: “El Presidente no vino a pedir plata ni mendigar nada a Brasil”, aclaró el embajador.
“Lo que se vino a plantear acá (a Brasil), a partir de la preocupación del gobierno brasilero por el reclamo de los industriales brasileños, es que Brasil encuentre mecanismos para financiar a sus industrias, en definitiva a sus trabajadores en la relación comercial con Argentina”, precisó.
En ese punto, profundizó: “Con el objetivo de que se dinamice más el comercio bilateral, que no para de crecer, lo que se busca es que Brasil encuentre un mecanismo, ya sea con sus bancos, como el BNDES (Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social), con el Banco de Brasil, con sistemas de pago moneda locales ampliados, con su Banco Central, con su tesoro, a sus industrias”.
“Que no le dé plata a la Argentina, sino a sus industrias”, aclaró el embajador argentino en Brasil, quien continuó que “esto nace de la preocupación de Central Industrial de San Pablo”.
Ante el reclamo de rápidos resultados, Scioli señaló que “las cosas tienen un proceso” y recordó que “cuando logré destrabar todas las controversias comerciales que había que no permitían ingresar productos de economías regionales no lo hice en la primera charla con –el expresidente, Jair- Bolsonaro”.
“Después de unos meses de trabajo, se liberaron todas estas trabas”, contó el diplomático, quien además recordó sus gestiones para conseguir “la energía eléctrica que necesitó el país el año pasado y nos ahorramos la friolera de 600 millones de dólares en importar gas”.
Para Scioli, el déficit comercial con Brasil “esta explicado en lo que va del año por la importación de todos los materiales, llámese tubo, chapa de acero, minerales de hierro, para la construcción del Gasoducto ‘Néstor Kirchner’”.
“Y aparte, toda la importación que se está realizando de soja, que el mes pasado fue de USD 290 millones, fruto de la sequía en nuestro país, entonces aquí vinieron el Ministro de Economía (Sergio Massa), con el Canciller (Santiago Cafiero) y el Jefe de Gabinete (Agustín Rossi) a hacer una exposición muy clara, objetiva, de lo que está ocurriendo y las consecuencias de esta sequía histórica”, señaló.
Por eso, el funcionario nacional manifestó “la decisión política de ambos presidentes de fortalecer e integrarnos cada vez más en las cadenas de valor, para lo cual, en esta coyuntura, nos hicimos eco del reclamo de los industriales brasileños”.
En ese sentido, Scioli reiteró que Alberto Fernández “nunca vino a pedir plata acá”, sino que “lo que vino es a plantear, a partir de la preocupación de Brasil, por las restricciones que hay en este momento, por las divisas de pago inmediato, para que Brasil encuentre financiamiento para sus empresas”.
“Esto es lo que se planteó. Y también se explicó de cara al futuro como Argentina va a tener todas las divisas que necesite su aparato productivo y el impacto que va a tener la segunda etapa del Gasoducto, lo que está ocurriendo en el sector de la minería, y lo que ya está previsto para el año próximo en materia de sector agroindustrial”, apuntó.
Scioli puso de ejemplo de las negociaciones entre los gobiernos de ambos países al gasoducto Néstor Kirchner al afirmar que “el gobierno anterior –brasileño- un día me llamó porque estaban interesados con que el BNDES financie la segunda etapa del Gasoducto”.
“Comenzó con el gobierno anterior porque Brasil quiere tener gas a un precio más competitivo que le de sustentabilidad energética a todos sus sectores productivos. Y ahora estamos terminando la gestión con el actual gobierno. No fue de un día para el otro”, estimó.
En ese sentido, detalló que “no es que el BNDES le va a mandar plata a la Argentina, sino que va camino a financiar a las fábricas brasileras de los caños que se utilizan en el gasoducto”.
También aseguró que “lo del gasoducto va camino a concretarse habiendo atravesado estas cuestiones burocráticas” y agregó que no tenía duda que “la decisión de Lula de ayudar a las empresas brasileras llevará a encontrar una solución a esta coyuntura que tiene Argentina” impulsada por la sequía, que hace que haya 20 mil millones menos en las reservas del BCRA.
“Se tienen que generar este tipo de mecanismos, como lo hizo China”, resumió Scioli.
En ese marco, Scioli consideró que Lula “está buscando financiar a sus exportadores e industrias, defender el interés brasilero”.
“Esa es su preocupación y por eso estuvo 8 horas. Un presidente no le dedica ocho horas de su agenda a un país con el máximo nivel de su gobierno sino tiene la clara decisión de encontrar una solución. La vamos a encontrar”, estimó.